Los constantes fallos eléctricos perjudican las labores en hospitales de Zulia, estado fronterizo con Colombia, detalló un reportaje de la BBC.
(Agencia N+1 / Beatriz de Vera). Debido a los constantes fallos eléctricos, los refrigeradores de unos de los principales hospitales del estado de Zulia, en Venezuela, no pueden mantener refrigerados los cuerpos de las personas fallecidas, que permanecen durante meses a temperatura ambiente en medio de su proceso de descomposición, según ha podido documentar BBC Mundo.
El centro, fronterizo con Colombia, está preparado para que los cadáveres permanezcan solo unas horas, pero los cuerpos no reclamados permanecen sobre las mesas metálicas en la estancia sin refrigerar, por lo que muchos terminan estallando en el lugar, informa la cadena de noticias.
El sistema de aire acondicionado tampoco está habilitado, lo que obliga al personal de la morgue, ubicada en el sótano del hospital, a mantener las puertas abiertas en busca de ventilación, pese a que debería estar herméticamente cerrada, pues el olor, dicen, resulta insoportable. “Se me están pudriendo 2 o 3 cadáveres cada semana”, contaba al medio estadounidense el encargado del hospital.
Explosiones
El mismo empleado, contó a la cadena que ha sido testigo de estallidos en los cadáveres, en medio de su proceso de descomposición. Este proceso se conoce como fase enfisematosa: por la acumulación de gases, varias partes del cuerpo se hinchan y revientan al no poder contenerlos. Si es tan desconocido es porque debería suceder cuando ya el cadáver ha sido enterrado.
Según cuentan los empleados, muchas veces nadie se hace responsable de los cadáveres: ni la funeraria se los lleva porque el gobierno no le paga, ni las familias pueden costearse un entierro debido a la situación actual del país. Si acaso los Wayuú, una comunidad indígena que tiene presencia en esa zona, reclama los cuerpos de su pueblo y los dejan en alguna fosa común, explican los trabajadores.
Desde el Ministerio para la Energía Eléctrica han manifestado ya que los racionamientos de energía han terminado, pero la situación de la morgue no presenta mejora.
Esta noticia ha sido publicada originalmente en N+1, ciencia que suma.
Comparte esta noticia