El productor, compositor y músico Gustavo Santaolalla, es consciente de que en Latinoamérica tenemos una creatividad tan buena como la de los anglosajones o incluso mejor.
Dos Óscar de la Academia de Hollywood, un Globo de Oro, 2 premios Grammys y 12 Grammy Latinos avalan a Gustavo Santaolalla, productor, compositor, músico y responsable en buena medida de la explosión del rock latinoamericano, para decir que "un disco de Café Tacvba no tiene nada que envidiar a uno de Radiohead".
"Siempre fui consciente de que en Latinoamérica teníamos una creatividad tan buena como la de los anglosajones o incluso mejor, porque para la música alternativa y su narrativa es mejor el caldo de cultivo sociopolítico que hay allí", opina el argentino antes de su participación en las charlas organizadas en Madrid por el diario New York Times.
Autor como solista de "Santaolalla" (1982), disco inspirador de Soda Stereo, y productor de grupos como los mencionados Café Tacvba, Molotov o Caifanes, se enorgullece de haber colaborado "mucho" para que exista eso que se dio en llamar revolución del rock latino y que hoy vuelve a estar más viva que nunca.
El veterano autor se ha labrado además fama como uno de los principales compositores de música para el cine, con sendas estatuillas doradas de Hollywood por las bandas sonoras de "Babel" y de "Brokeback Mountain".
Aquella cinta de Ang Lee, ha dicho, representa el ejemplo máximo de su forma de trabajar para cine: sin haber visto la película, a partir de sus conversaciones con el director y del libreto. De hecho, aquella partitura se creó antes de que se filmara nada.
"Me han dicho muchas veces que mi música tiene numeroso aspectos visuales. Creo que es una forma de pensar la música, que hacer un disco tiene mucho que ver con la narrativa cinematográfica", explica, en un juego dialéctico entre versos y estribillos en busca de la sorpresa y la tensión.
Su último proyecto cinematográfico es "Agosto" ("August: Osage county"), de John Wells, junto a un reparto apabullante encabezado por Meryl Streep, Julia Roberts, Ewan McGregor y Benedict Cumberbatch, entre otros.
Sin embargo, solo en una ocasión la actuación de un actor le "pegó" suficiente como para construir música en torno a su expresión: fue Javier Bardem en "Biutiful", de Alejandro González Iñárritu.
EFE
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