Una treintena de veteranos tangueros uruguayos se congregaron ante el busto del artista para descubrir una placa y depositar una flor en memoria del cantor.
Montevideo recordó el 75 aniversario de la muerte de Carlos Gardel con un humilde homenaje en el popular y arrabalero barrio Sur, donde los locales aseguran que el "Zorzal criollo" acudió a la escuela a finales del siglo XIX.
Apenas una treintena de veteranos tangueros uruguayos se congregaron ante el busto que artista tiene en ese barrio, muy cerca del Río de la Plata, para descubrir una placa y depositar una flor en memoria del cantor, muerto el 24 de junio de 1935 en un accidente de aviación en Medellín (Colombia).
Ante la estatua, dañada por el tiempo y ensuciada por los gamberros, una pareja de baile y un músico ofrecieron su arte a Gardel ante la atenta mirada de los asistentes.
Junto a los tangueros, también presenciaron el homenaje varios habitantes del barrio Sur, punto neurálgico de la comunidad afrouruguaya y cuyas esquinas aún mantienen el aire decadente y de mezcla de culturas que a principios del siglo XX le llevó a ser uno de los lugares de nacimiento de la música más representativa del Río de la Plata.
Según dijo a Efe Juan Pedro Rubinstein, presidente de la Federación Uruguaya de Tango, el homenaje a Gardel es casi una necesidad para los aficionados porque pese a los años transcurridos desde su muerte "sigue siendo la primera y la máxima figura" de este arte.
Ante el busto de Gardel, ubicado en la antigua calle Isla de Flores, hoy bautizada con el nombre del artista, Rubinstein recordó que el intérprete pasó por esa misma zona en su juventud y niñez y que acudió a los "conventillos" (casas populares habitadas por negros e inmigrantes a principios del XX) para "aprender" de los intérpretes del tango primitivo.
"Obviamente el tango es del Río de la Plata y Gardel es de ambas orillas, si bien mantenemos y creemos que nació en Tacuarembó (Uruguay). Pero dejando de lado este tema polémico, yo creo que hoy en día Gardel es universal", afirmó Rubinstein refiriéndose a la polémica suscitada con Argentina sobre el origen del cantante.
Esta polémica sigue presente en los festejos por el aniversario de su muerte. La ciudad francesa de Toulouse es la cuna oficial del genial cantante, sobre la base de una partida de nacimiento a nombre de Charles Romuald Gardés, que con el tiempo sería Carlos Gardel, según el propio cantante dejó dicho en su testamento.
La otra historia, basada en datos que también el propio Gardel dio, en este caso al inscribirse en el consulado uruguayo de Buenos Aires en 1920, dice que Gardés y Gardel no fueron la misma persona.
El intérprete de "Mi noche triste" fue fruto del amor prohibido entre un militar y su cuñada, menor de edad, y nació en Tacuarembó, pero fue dado en adopción a una francesa, Berthe Gardés, para evitar el escándalo, dice también la versión uruguaya.
Tacuarembó, a 390 kilómetros de Montevideo, también realizó un extenso homenaje al músico, al igual que Medellín, donde murió, y Buenos Aires, donde encontró la fama y desde donde llevó al tango a los principales escenarios de todo el mundo.
EFE
Apenas una treintena de veteranos tangueros uruguayos se congregaron ante el busto que artista tiene en ese barrio, muy cerca del Río de la Plata, para descubrir una placa y depositar una flor en memoria del cantor, muerto el 24 de junio de 1935 en un accidente de aviación en Medellín (Colombia).
Ante la estatua, dañada por el tiempo y ensuciada por los gamberros, una pareja de baile y un músico ofrecieron su arte a Gardel ante la atenta mirada de los asistentes.
Junto a los tangueros, también presenciaron el homenaje varios habitantes del barrio Sur, punto neurálgico de la comunidad afrouruguaya y cuyas esquinas aún mantienen el aire decadente y de mezcla de culturas que a principios del siglo XX le llevó a ser uno de los lugares de nacimiento de la música más representativa del Río de la Plata.
Según dijo a Efe Juan Pedro Rubinstein, presidente de la Federación Uruguaya de Tango, el homenaje a Gardel es casi una necesidad para los aficionados porque pese a los años transcurridos desde su muerte "sigue siendo la primera y la máxima figura" de este arte.
Ante el busto de Gardel, ubicado en la antigua calle Isla de Flores, hoy bautizada con el nombre del artista, Rubinstein recordó que el intérprete pasó por esa misma zona en su juventud y niñez y que acudió a los "conventillos" (casas populares habitadas por negros e inmigrantes a principios del XX) para "aprender" de los intérpretes del tango primitivo.
"Obviamente el tango es del Río de la Plata y Gardel es de ambas orillas, si bien mantenemos y creemos que nació en Tacuarembó (Uruguay). Pero dejando de lado este tema polémico, yo creo que hoy en día Gardel es universal", afirmó Rubinstein refiriéndose a la polémica suscitada con Argentina sobre el origen del cantante.
Esta polémica sigue presente en los festejos por el aniversario de su muerte. La ciudad francesa de Toulouse es la cuna oficial del genial cantante, sobre la base de una partida de nacimiento a nombre de Charles Romuald Gardés, que con el tiempo sería Carlos Gardel, según el propio cantante dejó dicho en su testamento.
La otra historia, basada en datos que también el propio Gardel dio, en este caso al inscribirse en el consulado uruguayo de Buenos Aires en 1920, dice que Gardés y Gardel no fueron la misma persona.
El intérprete de "Mi noche triste" fue fruto del amor prohibido entre un militar y su cuñada, menor de edad, y nació en Tacuarembó, pero fue dado en adopción a una francesa, Berthe Gardés, para evitar el escándalo, dice también la versión uruguaya.
Tacuarembó, a 390 kilómetros de Montevideo, también realizó un extenso homenaje al músico, al igual que Medellín, donde murió, y Buenos Aires, donde encontró la fama y desde donde llevó al tango a los principales escenarios de todo el mundo.
EFE
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