Los invasores, entre adultos y niños, habían instalado carpas, palos y esteras, pero fueron desalojados de manera pacífica por la Policía Nacional.
Más de 200 personas, entre adultos y niños, invadieron dos mil metros cuadrados del Campo Santo de Yungay, en la región Ancash, pero luego fueron desalojados de manera pacífica por la Policía Nacional.
Los invasores aprovecharon la oscuridad de la noche para instalar carpas, palos y esteras en el terreno, que fue declarado zona intangible por el Gobierno luego que un aluvión sepultara a más de 25 mil personas durante el terremoto de 1970.
Las fuerzas del orden destacaron a 100 efectivos para el cuidado del Campo Santo ante la amenaza de una nueva ocupación del terreno.
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