Unos 50 transportistas con sus respectivas unidades protestaron porque una resolución les impide prestar el servicio de transporte público de pasajeros como colectivos.
En forma inesperada y por espacio de dos horas, el parque principal de Chiclayo (región Lambayeque) fue tomado parcialmente por unos 50 conductores de las unidades conocidas como minivan.
Con sus respectivas unidades, los hombres del volante protestaron demandando a la alcaldesa Elizabeth Montenegro Dávila que deje sin efecto la Resolución Gerencial Municipal N° 208-2012, que les impide prestar el servicio de transporte público de pasajeros como colectivos.
Los manifestantes se apostaron en la puerta del Palacio Municipal e intentaron dialogar con la autoridad edil, presentándose inmediatamente agentes de la Policía Nacional, los que procedieron al desalojo utilizando la fuerza y lanzado gas pimienta.
El dirigente de esta modalidad de transporte, Ruperto Míñope Guevara, calificó de absurda la decisión del municipio que declara “no procedente autorizar a los vehículos minivan el traslado de pasajeros en condición de autos colectivos”.
Refirió que 300 transportistas son perjudicados. “Los que protestamos hemos vendido nuestros autos colectivos antiguos, reemplazándolos por una minivan. Ahora el municipio no quiere que trabajemos, esto es absurdo”, manifestó.
La resolución indica que de acuerdo a un oficio cursado por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, las minivan son de categoría M1, por lo tanto solo pueden prestar servicio de taxi y no de colectivo.
Por su parte, los dirigentes de las camionetas rurales de servicio urbano e interurbano de esta ciudad se mostraron conformes con la decisión de la comuna pues aseguran que las minivan generan competencia desleal.
Lea más noticias de la región Lambayeque
Video recomendado
Comparte esta noticia