Unas 2 mil familias del centro poblado menor de Colaya están en peligro de quedar aislados si es que no se realizan los trabajos de limpieza en los caminos.
El teniente gobernador del sector Corral de Piedra en el distrito lambayecano de Salas, Rufino Purihuamán, formuló un llamado a las autoridades regionales debido a que las lluvias registradas en los últimos días han dañado las trochas carrozables y caminos que se conectan con el centro poblado menor de Colaya.
Explicó que un promedio de 2 mil familias de esta zona están en peligro de quedar aislados si es que no se realizan los trabajos de limpieza en los caminos que por ahora son de difícil acceso para las unidades de transporte.
“Nos vemos obligados a caminar durante una hora para llegar a Colaya, los carros ya no suben más, y muchos están perjudicándose porque no pueden trasladar sus productos como papas, arvejas y otras verduras hacia Chiclayo”, agregó.
En las zonas aledañas como Penachí, La Ramada, Kerguer y Pampa Verde la situación también es complicada.
Finalmente, expresó que los más perjudicados son los niños y ancianos, quienes no pueden ser atendidos a tiempo en los centros de salud, los cuales se encuentran muy alejados de los caseríos.
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