Los familiares de las víctimas esperan la llegada del fiscal para que se proceda a la identificación del los cuerpos tras el trágico accidente registrado ayer en el kilómetro 208 de la Panamericana Norte.
Siete cadáveres calcinados de los 13 registrados, tras el choque del bus y un tráiler que se incendiaron ayer en el kilómetro 208 de la Panamericana Norte en el distrito de Paramonga, provincia de Barranca (Lima), permanecen en la morgue del hospital de Apoyo, mientras los familiares esperan la llegada del fiscal para la identificación de los cuerpos.
El hermano del conductor bus Super Latino, manifestó que está desde las 3 de la madrugada a espera de que se realicen las diligencias del caso. “He llegado de Piura y hasta el momento no se ha acercado el fiscal para poder identificar al cadáver de mi hermano que está calcinado”, refirió.
Otra mujer, entre lágrimas, dijo que su hermano no aparece en la relación de heridos y necesita conocer el nombre de los que perecieron calcinados. “Que nos ayuden, necesito identificar a mi hermano por favor”, señaló.
En tanto, el director del hospital de Barranca, Juan Pablo Beteta Espejo, informó que de los 53 heridos que fueron internados en esta institución, tres permanecen hospitalizados para su respectiva recuperación con pronóstico favorable.
Además, dio a conocer que cuatro pacientes fueron transferidos a Lima, dos a la clínica San Bernardo y dos al hospital Loayza, los cuales presentan policontusiones, uno traumatismo encéfalo craneano moderado grave, otra por quemaduras de tercer y cuarto grado, entre otros.
Cabe precisar, que el choque e incendio entre el bus de la empresa Super Latino que se dirigía de Cayaltí (Chiclayo) hacia Lima y el tráiler que transportaba cemento, dejó 13 muertos y más de 50 heridos.
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