Las comunidades del distrito de San Antonio de Cachi son las más afectadas. Incluso las cosechas quedaron dañadas.
Una torrencial lluvia acompañada de fuertes vientos y granizada viene dejando considerables daños en varias zonas de la provincia de Andahuaylas, región Apurímac.
En el distrito de San Antonio de Cachi, a 80 kilómetros de esta ciudad, diez viviendas quedaron inundadas y sin techo producto de la fuerte precipitación pluvial.
Asimismo, los cultivos de papa y maíz, recientemente cultivados, quedaron seriamente afectados.
De igual manera, las comunidades de Cachihuancaray, Huantana y Campanayoc son las más afectadas, informó el alcalde de San Antonio de Cachi, Diógenes Gómez Orihuela.
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