Miguel Salinas Tantaquispe tiene 17 años y aunque no ingresó a la universidad en el primer intento, asegura que desea alcanzar el cómputo general en el próximo examen de admisión.
Miguelito es un joven de 17 años que nació sin extremidades, pero esto no fue impedimento para que lleve una vida normal. RPP Noticias lo visitó en su colegio donde cursa el quinto año de secundaria y es alcalde escolar.
Miguel Salinas Tantaquispe postuló el último domingo a la Universidad Nacional de Trujillo pero no ingresó. Ahora su meta es volver a postular e ingresar a la carrera de Derecho.
Junto a sus compañeros de la institución educativa Jorge Basadre del distrito Florencia de Mora nos cuenta que su curso favorito es Matemáticas y que, incluso, ha participado en concursos representando a su colegio. Entonces, ¿por qué postuló a Derecho?, en realidad su sueño siempre fue ser ingeniero civil; sin embargo la limitación de sus extremidades no se lo permite, asegura.
Su mirada es triste y a la vez fría. Dice que la muerte de su hermano mayor, hace dos años, lo marcó para siempre. Él era su guía, su amigo y quien le enseñó a seguir adelante sin importar lo que la gente diga.
Asegura que nunca se sintió discapacitado, porque la discapacidad está en la mente. Sus compañeros, con los que compartió aula desde que tenía 7 años, dicen que nunca lo vieron como una persona diferente, sino más bien como un compañero más. Y así lo demuestran cuando lo saludan y ríen con él, no de él.
Lo dejamos continuar un examen y nos despide dejando un mensaje para la gente: que nunca discriminen a nadie por su condición física, porque esa discapacidad no es incapacidad de lograr sus sueños.
Comparte esta noticia