Jefe de la Defensoría del Pueblo, José Luis Agüero Lobatón, verificó falta de camas, déficit de insumos y ausencia de área de triaje.
Dos de los hospitales más grandes de la ciudad de Trujillo tienen graves deficiencias que necesitan ser subsanadas a la brevedad posible, así lo señaló el representante de la Defensoría del Pueblo en La Libertad, José Luis Agüero Lobatón.
La Defensoría del Pueblo realizó una inspección en diversos hospitales y en el caso del Regional las principales falencias son la falta de camas en el servicio de UCI, déficit de insumos de laboratorio, ausencia de área de triaje (solo se tiene una acondicionada por necesidad), falta de personal técnico, déficit de sillas de ruedas, la farmacia no es adecuada para almacenar medicamentos, entre otros puntos que deberán ser mejorados.
Mientras tanto, la situación del hospital Víctor Lazarte Echegaray es similar pues se encontró el tomógrafo malogrado, ausencia de un resonador magnético, falta de reactivos para perfil hepático, falta de personal.
Lo más grave es que no cuentan con sala de aislamiento para pacientes con tuberculosis poniendo en riesgo a pacientes y personal de salud. Además se verificó que no hay extractores de aire, falta de sala de espera en el área de emergencia, falta de silla de rueda, hacinamiento en el área de emergencia, entre algunas deficiencias más.
José Luis Agüero Lobatón manifestó que se ha remitido la comunicación formal a los directores de ambos hospitales para que tomen las acciones correctivas en el menor tiempo posible, pues volverán a realizar una nueva inspección.
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