El dueño de la tamalería “El Gritón” distribuyó gratuitamente más de 300 tamales en la plaza de armas de Puno como agradecimiento a la preferencia de los pobladores puneños.
A Carlos Villa, dedicado a la venta de tamales hace 25 años, no se le ocurrió mejor idea que distribuir gratuitamente este suculento potaje para conmemorar el aniversario número 25 de su negocio en la ciudad de Puno.
Sorpresivamente, el propietario de la tamalería “El Gritón” acompañado de su ayudante se apostaron en la plaza de armas de la ciudad de Puno para distribuir sus productos a los transeúntes, según él, en agradecimiento a la preferencia del pueblo puneño.
Dijo que son más de 300 tamales los que ha distribuido, destacando el buen sabor de los mismos, así como el esmero con el que son preparados los que le otorgan un sello de calidad propio, además de su peculiar y conocida forma de promocionarlos gritando a viva voz: ¡tamaleeees!.
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