David Pineki Moyano criticó desde España la falta de educación a la juventud sobre las atrocidades cometidas por Sendero Luminoso.
El 12 de septiembre de 1992, Maritza Garrido Lecca vio cómo su mayor secreto salía a la luz. Los miembros del Grupo Especial de Inteligencia Nacional descubrieron que en el interior de la casa que compartía con su pareja, el arquitecto Carlos Incháustegui, ambos ocultaban a Abimael Guzmán, cabecilla Sendero Luminoso, y a la cúpula del grupo terrorista. Luego de 25 años en prisión, este martes la ex bailarina saldrá de prisión. Para David Pineki, hijo de María Elena Moyano, la asesinada luchadora por los derechos de la mujer, hay pocas noticias que lo puedan indignar más.
“Estamos retrocediendo de una forma muy grande, porque liberar asesinos que cometieron atrocidades es triste", dijo este lunes desde España a RPP Noticias. "Nuestros políticos no hayan hecho nada no tiene sentido. Que unos asesinos estén por la calle es una tristeza y una marcha atrás”.
María Elena Moyano, también conocida como 'Madre Coraje', fue asesinada y descuartizada el 15 de febrero de 1992 por un comando de aniquilamiento de Sendero Luminoso. Días después, su tumba fue dinamitada con el fin de generar miedo y acabar con la resistencia que Moyano lideraba en Villa El Salvador. David Pineki tenía entonces apenas 9 años.
Preocupado por la juventud. Además, dijo que las autoridades no están haciendo lo suficiente para enseñarle a los más jóvenes sobre los asesinatos y la actividad terrorista de Sendero en la década de 1980 y 1990 en el Perú.
“Estoy viendo un retroceso muy grande. Que haya flecos de este grupo terrorista significa que no se han hecho las cosas bien. Han pasado 25 años de que ese asesino (Guzmán) está en la cárcel y aún hay gente que sigue su ideología. No estamos haciendo las cosas bien. La juventud es muy manipulable si no tiene la información suficiente. Me siento impotente. Unos asesinos salen a la calle”.
Comparte esta noticia