Salomé Ibarguen tiene 88 años y afirma ser una enviada de Dios que solo busca proteger al ex presidente Alberto Fujimori.
El juicio a Fujimori lleva ya un año y tres meses desde su inicio, el diez de diciembre del 2007, y el público que asiste a estas audiencias varía de acuerdo al interés de las mismas, pero quien se ha mantenido constante y no ha faltado a ninguna cita es Salomé, la esotérica de Fujimori.
Salomé Ibarguen tiene 88 años y afirma ser una enviada de Dios que solo busca proteger al ex presidente, a quien acompaña desde hace ya 152 audiencias públicas, asistida solo por una bastón que la ayuda a desplazarse por las instalaciones destinadas al público, en
Ella no habla mucho y mantiene un perfil bajo pero ha provocado temor entre algunos de los abogados que buscan una sentencia contra Fujimori Fujimori, quienes, por si las dudas, han optado por buscar protección contra sus supuestas brujerías.
Por Ricardo Gómez Palma
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