Así de claro: ¿en qué consiste el problema del complejo Doe Run?

Desde hace varios años Doe Run está bajo el ojo de la tormenta. ¿Qué sucede con este complejo metalúrgico, con sus trabajadores y el Gobierno?

Actividades paralizadas. Las actividades de Doe Run en La Oroya, Junín, están paralizadas desde el año 2009 por una crisis financiera que empujó a la empresa al borde de la quiebra. 3500 trabajadores perdieron sus empleos y otras miles de personas beneficiarios directa o indirectamente de las actividades de este complejo se quedaron sin su fuente de ingresos.

Estándares de contaminación. La venta de la refinería se canceló porque unos estudios de estándares contra la contaminación no fueron aceptados por el Gobierno Peruano. Los trabajadores y la propia empresa tienen una opinión contraria, por eso surge el conflicto.

¿Qué se requiere para solucionar este problema? “La comisión que se va a conformar debe agotar todas las posibilidades y dar una posibilidad de cómo restablecer el circuito del cobre, que es lo que cuesta más, y que las emisiones se adecúen progresivamente a los estándares de calidad”, explica el ingeniero en minas Rómulo Mucho Mamani.

Mientras tanto, se busca una solución con iniciativa desde el Congreso para modificar la ley general del sistema concursal que le permitiría un respiro más a la empresa. Habrá que ver qué pasa. ¡Así de claro!