La exministra de Cultura, Gisela Ortiz, aclaró que durante su gestión se contuvo el desmoronamiento de la estructura de Kuélap y que se reunió con un equipo de la Universidad de Varsovia para atender el abandono del complejo arqueológico, pero que no se logró firmar un convenio porque ella dejó el cargo.
La exministra de Cultura, Gisela Ortiz, coincidió con el titular del sector, Alejandro Salas, en que hay una "responsabilidad heredada" de gestiones anteriores sobre la situación en el complejo arqueológico Kuélap, pero aclaró que no todos tienen el mismo nivel de responsabilidad.
En entrevista con el programa Nada Está Dicho de RPP Noticias, Gisela Ortiz afirmó que como chachapoyana al asumir el cargo de ministra de Cultura pensó en la "gran tarea" que significaba Kuélap tras años de "un abandono y de un mal trabajo realizado por el Plan Copesco".
"Comparto el sentido de una responsabilidad heredada que viene de muchas gestiones, pero que definitivamente no todos tenemos ese mismo nivel de responsabilidad", consideró.
Gisela Ortiz explicó que durante su gestión reunió a actores sociales de la región Amazonas donde se conoció el trabajo de un ingeniero chachapoyano sobre zonas bastante debilitadas de Kuelap que requerían una atención distinta.
"Kuelap tiene varios problemas, uno de estos es esta mala intervención del Plan Copesco, pero también tiene un problema de acumulación de agua, un problema de desmoranamiento de sus estructuras que ya se venía dando desde hace años", dijo. "Hasta la fecha no se ha podido identificar esas zonas de drenar", agregó sobre el sistema de drenaje ancestral en el lugar.
Hace falta convenio
La exministra de Cultura señaló que lo inmediato que hizo su gestión "con muchas limitaciones" era contener el desmoronamiento de la estructura, a través de geomallas y tabiques. Sin embargo, explicó que su sector buscaba identificar las causas de las fracturas profundas dentro de la estructura.
"Por eso es que nosotros comenzamos a buscar especialistas de afuera, reconociendo que se necesita un equipo multidisciplinario. No son solo arqueólogos los que tienen la respuesta, sino también restauradores, conservacionistas, geógrafos, ingenieros hidráulicos y toda la diversidad de profesionales. Y así llegamos a la Universidad de Varsovia, con quienes tuvimos una primera reunión en diciembre y eran especialistas que han trabajado antes en Egipto y que hacen un trabajo mucho más tecnificado", afirmó.
Gisela Ortiz sostuvo que con este primer equipo se viajó en enero a la zona del complejo arqueológico Kuélap y aseguró que el siguiente paso era generar un convenio.
"Cuando ellos volvieron de Kuélap, porque yo ya no era ministra, tuvieron una reunión con el ministro Salas para informarle y para dar esta continuidad. Sé que después de eso ha habido una insistencia para firmar un convenio", indicó.
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