En su segmento 'Así de Claro', José María 'Chema' Salcedo te explica en qué consiste la nueva polémica de la exprimera dama y su salida del país.
A pesar de sus promesas de que no saldría del Perú, se hizo público su nombramiento como directora de la oficina de enlace de la Organización de las Naciones Unidas para la alimentación y la agricultura (FAO), la exprimera dama Nadine Heredia tomó un vuelo en primera clase con destino a Ginebra, Suiza.
Todo esto lo hizo a pesar de la indagación fiscal que se le está realizando por aportes recibidos por el Partido Nacionalista, del que es presidenta, entre el 2005 y el 2001, y por el que tiene una comparecencia restringida. Es decir, no debe ausentarse de donde reside ni cambiar de domicilio sin autorización judicial.
“La comparecencia es una medida cautelar que es menos rígida que la detención. Permite que una persona sea procesada penalmente en libertad, permitiendo su circulación, pero le pone algunas restricciones. Por ejemplo, si quiere salir del país tiene que comunicarlo previamente explicando el lugar, el motivo del viaje, el tiempo que va a durar. Además obliga a pagar una caución, una garantía, un dinero que garantice el cumplimiento de las reglas de conducta que el procesado ha asumido”, explica el abogado constitucionalista Natale Amprimo.
A la presidenta del Partido Nacionalista no se le cuestionaban sus vínculos laborales con Martín Belaunde Lossio y presuntos delitos de usurpación de la función pública del Presidente de la República. Heredia Alarcón también había sido acusada por transferencias a cuentas de su amiga Rocío Calderón Vinatea y a su madre Lourdes Vinatea Milla.
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