En respuesta a la presión antimonopolio, Google propone reformas que mantendrían el navegador bajo su control, pero con nuevas regulaciones.
Google ha presentado una contrapropuesta al Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ) para evitar la venta forzada de su navegador Chrome, en lo que representa el último capítulo de una batalla legal por prácticas antimonopolio que podría redefinir el futuro de la tecnología estadounidense.
La vicepresidenta de Asuntos Regulatorios de Google, Lee-Anne Mulholland, presentó una serie de medidas alternativas que, según la empresa, abordarían las preocupaciones anticompetitivas sin necesidad de desprenderse del popular navegador web. Entre las propuestas principales destacan:
- Permitir que las empresas de navegadores como Apple y Mozilla realicen acuerdos con cualquier motor de búsqueda que consideren mejor para sus usuarios
- Facilitar múltiples acuerdos predeterminados en diferentes plataformas
- Posibilitar cambios en el proveedor de búsqueda predeterminado cada 12 meses
- Otorgar mayor flexibilidad a los fabricantes de dispositivos para precargar múltiples motores de búsqueda
Esta propuesta llega después de que en noviembre el DOJ y el juez Amit Mehta buscaran forzar a Google a vender Chrome por prácticas anticompetitivas, siguiendo un fallo histórico que declaró a la empresa como un monopolio ilegal de búsqueda en julio.
El juicio y las propuestas han llamado la atención de Apple, que ha pedido participar del juicio. La compañía buscaría proteger los pagos que recibe de Google para ser el buscados predeterminado en sus dispositivos, estos ascendieron a un estimado de 20 mil millones de dólares en 2022, según indicó Reuters.
Google y un proceso que aún no termina
Google argumenta que las medidas del DOJ son "extremas" y podrían perjudicar la innovación tecnológica estadounidense. La empresa sostiene que el caso se centra en contratos de distribución y que las soluciones deberían limitarse a ese ámbito, sin afectar la estructura fundamental de la compañía.
Un punto crucial en este conflicto será la audiencia probatoria programada del 22 de abril al 2 de mayo de 2025, donde todas las partes argumentarán sobre la solución antimonopolio más apropiada. El juez Mehta ha enfatizado que el calendario de procedimientos no se verá afectado por el cambio de administración en la Casa Blanca.
Google ha anunciado que apelará la decisión del tribunal, aunque primero debe completar el proceso de propuesta de remedios. La empresa mantiene que los usuarios eligen Google por preferencia, no por obligación, y que el panorama competitivo es altamente dinámico.
Comparte esta noticia