Los cuerpos son preservados gracias a la "plastinación", una técnica del doctor alemán Gunter von Hagens.
El Museo de los seres humanos, sede permanente de la colección de cadáveres humanos tratados por el alemán Gunter von Hagens para permanecer inalterados, abrirá mañana sus puertas en Berlín rodeado de polémica.
A los pies de la icónica torre de telecomunicaciones del centro de la capital alemana, el museo acoge una veintena de cuerpos completos y unos 200 órganos y aparatos humanos preservados gracias a la técnica de la "plastinación" desarrollada por Von Hagens, conocido como el "doctor muerte".
En un ambiente de penumbra y con una música tenue se puede avanzar entre vitrinas que contienen desde un fémur humano seccionado longitudinalmente a un corazón, unos riñones, un pene o un cerebro unido a una médula espinal, pasando por varios pulmones progresivamente ennegrecidos por los efectos del tabaco o unos intestinos estirados.
El objetivo de la muestra, indicó hoy en la presentación del centro su comisaria y esposa de Von Hagens, Angelina Whalley, es "mostrar la complejidad del cuerpo humano, pero también su vulnerabilidad".
La exposición está dividida en secciones temáticas, como alimentación o movimiento, coronadas todas ellas por cuerpos completos "plastinados", casi siempre en complejas posiciones, como un patinador que tan sólo apoya en el suelo una mano, un gimnasta subido a unas anillas, una pareja de acróbatas o una bailarina en posición arabesque.
"Con la apertura del Museo de los Seres Humanos hemos podido cumplir un sueño de hace mucho tiempo", aseguró Whalley, que junto a Von Hagens llevaba más de una década estudiando esta posibilidad.
No obstante, la apertura del primer museo permanente para los preparados del "doctor muerte" ha estado rodeada de controversia pues a las tradicionales críticas al profesor alemán en su país se ha sumado, en esta ocasión, la oposición de las autoridades sanitarias del distrito berlinés de Mitte, que se oponían al proyecto.
Finalmente, un tribunal administrativo despejó el camino para la exposición, aunque con varios meses de retraso sobre la fecha inicialmente prevista.
Von Hagens, de 70 años, participó en la presentación de su museo pese estar visiblemente afectado de parkinson, y señaló que la apertura de la muestra es un "hito" en su carrera.
El "Doctor muerte" saltó a la fama tras "plastinar" su primer cadáver en 1990, tras veinte años de investigación en Heidelberg (oeste de Alemania), ciudad a la que emigró desde la antigua Alemania oriental para estudiar.
La "plastinación" es una técnica de preservación de material biológico patentada por este alemán que consiste en sustituir los líquidos y lípidos naturales del cuerpo por resinas elásticas de silicona y materiales rígidos.
Desde la primera exposición, celebrada en Japón en 1995, 40 millones de personas en más de 20 países han visitado las muestras del polémico profesor.
En 2006, Von Hagens abrió en la pequeña localidad de Guben (este de Alemania) su taller museo "Plastinarium", de 2.500 metros cuadrados, con decenas de cuerpos enteros -algunos en posturas cotidianas- y una gran cantidad de partes, extremidades y órganos.
EFE
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