El problema ocurrió cuando su abuela se desmayó mientras iba al volante, hecho que desconcertó al niño de 10 años Gryffin Sander.
Las habilidades con los videojuegos le salvaron la vida al niño de 10 años Gryffin Sander, su hermano de cuatro y su abuela mientras iban a borde del vehículo familiar.
El problema ocurrió cuando la anciana se desmayó mientras iba al volante, hecho que desconcertó a Gryffin.
"Lo primero que pensé fue: ¿es esto una prueba o algo así?", dijo el niño cuando fue consultado sobre lo ocurrido.
La abuela, a quien intentó despertar, permanecía inconsicente. Por ello, decidió tomar el control del vehículo y conducirlo fuera de la carretera. Según sus declaraciones, esto lo pudo lograr gracias a que aprendió un poco de manejo jugando Mario Kart.
"Y soy muy bueno conduciendo carritos motorizados", agregó.
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