ZTE sigue presente en todas las gamas y en NIUSGEEK tenemos un representante de la media baja: ¿Vale la pena el ZTE Blade V30?
ZTE es una marca a la que he perdido el rastro desde hace un par de años. Si bien es cierto, me seguía llamando la atención de la gama alta con sus Axon, en la gama media y de entrada estaba siendo desfasada por la fuerte competencia que se halla en Xiaomi, Lenovo o Samsung, además de la llegada de Oppo, realme, Vivo y Honor, por lo que desconocía gran parte de sus modelos en este ámbito.
Sin embargo, ZTE sigue siendo una marca con una presencia fuerte en mercados como el peruano, teniendo ya un sector ganado esperando sus novedades. Por eso, fue un gusto volver a la gama media baja para probar un equipo asequible dentro de nuestro contexto: el ZTE Blade V30. ¿Podrá sorprendernos este celular?
Especificaciones del ZTE Blade V30
- Peso: 193 gr
- Tamaño: 6.67" FHD+
- Dimensiones: 165.8mm x 77mm x 8.9mm
- Cámara principal: 64MP + 8MP + 5MP + 2MP
- Cámara frontal: 16MP
- Procesador: Unisoc T618 Octa-Core 2.0GHz x 2 + 2.0GHz x 6
- Memoria interna: 128GB
- Batería: 5000mAh
Diseño
Para ser sinceros, el estilo del ZTE Blade V30 me pareció bastante atrayente y se robó miradas entre mis conocidos.
Contamos con una parte trasera gobernada por un gran módulo de cámaras rectangular en la parte superior izquierda. Este sector no sobresale fuertemente de la unidad, sino que está colocado de manera elegante para distribuir sus cuatros sensores más el flash. Además, si lo echas en una superficie sólida, no se balanceará.
El material que predomina es el policarbonato y, aunque no luce mal, es ciertamente un poco débil a superficies rugosas. Ten cuidado en dónde lo colocas si es que no quieres dañarlo (lo experimenté en carne propia).
En cuanto a huellas, recoge la suciedad de manera no tan grosera, sin absorberla completamente, por lo que con una limpieza de rutina volverá a la normalidad.
Por su cara principal, contamos con una pantalla IPS de 6.67” con resolución FHD+ con muy pocos bordes. En la parte superior, el sensor de selfies está colocado al centro de la pantalla, sin llevar ninguna especie de notch. Práctico y sencillo.
Pasemos a las laterales. Arriba lleva la ranura para chip y memoria SD, además de un pequeño micrófono. El lado derecho mantiene los botones para bajar y aumentar el volumen, acompañado del sensor de huellas que también funciona como botón de bloqueo. Adelantando opinión, el sensor es rápido y accesible, mientras que el reconocimiento facial es lento y no tan recomendado.
Cerramos los puertos (el lado izquierdo no posee ninguno) abajo, con un siempre conveniente puerto Jack para audífonos de 3.5 mm, el botón de reinicio y el único altavoz. Debo mencionar que la caja nos trae un audífono de cable para acompañar nuestras salidas, hecho que resalto porque llevo ya buen tiempo sin ver uno incorporado.
Antes de pasar al desempeño como tal, debo mencionar que, aunque parece un celular pesado, al ZTE Blade V30 lo encontré más ligero de lo que aparenta, siendo cómodo en el agarre y en el uso cotidiano.
Desempeño
Con pocos peros en el diseño (más allá del perfil de plástico que se comprende por su precio), el desempeño general me ha dejado dividido: estoy conforme con varias de sus características, pero siento que le falta mucha alma en otras.
El ZTE Blade V30 viene con un procesador Unisoc T618, un chip pensado para la gama baja, intentando trabajar dentro de sus limitaciones, especialmente para tareas no tan pesadas ni elevadas en número.
El celular es bueno en el uso de redes sociales, pero si las vas aglutinando y sumando apps de multimedia en el segundo plano, empiezan a aparecer algunos “hipos” o ralentizaciones que te forzarán a cerrar todo. Solo en una ocasión, el teléfono se me reinició completamente.
Pero este comportamiento es un poco extremo y no es recurrente, por lo que, si disfrutas de conversaciones de WhatsApp, un poco de navegación en Facebook y le añades algo de YouTube o Spotify, no deberías tener mayor inconveniente.
No es gamer
Fuimos sumándole rendimiento y empezamos a jugar con el ZTE Blade V30. Algo que debemos entender es que el procesador, aunque nos diga que sí, no está hecho necesariamente para juegos, por lo que tendremos que ser conscientes de algo: si queremos tener los títulos del momento, debemos jugar a una configuración mínima para tener el mayor desempeño.
Probamos con Call of Duty y Pokémon Unite, teniendo un desempeño correcto con pocas excepciones. Ten en cuenta que la configuración media no es recomendable para estas producciones de mayor calidad porque las caídas de frames empezarán a ser recurrentes.
Eso sí, dejo en claro que no se sobrecalienta pese al esfuerzo en juegos.
Android 11
Por el lado del software, me sorprendió ver un equipo de gama baja con el sistema Android 11 de manera preinstalada, sin necesidad de parches. Su experiencia será casi limpia, ya que, a pesar de que ZTE cuenta con una capa de personalización llamada MiFavor, esta es poco intrusiva en el uso del usuario. Siento que toma algunas pizcas del MIUI de Xiaomi, pero que da más la sensación de tener un Android puro.
Eso sí, aunque no mantiene tantas apps preinstaladas, me parece un poco incómodo tener como bloatware a las apps de la empresa de telefonía que los comercializa. Le quita gusto al equipo.
Como punto neutro, recuerdo que el equipo es compatible con las redes 4G, no las 5G. Asimismo, no cuenta con NFC.
Pantalla espaciosa
Para pasar a la multimedia, debemos detenernos en la pantalla. Pese a no ser OLED o AMOLED, es grande y trabaja correctamente en la reproducción de fotos y videos. Además, mantiene una gran densidad en pixeles, hecho que resalto. Cabe recordar que tiene una tasa de refresco estándar de 60 hercios.
Algo que me mantiene en vilo es que noté los colores saturados. Más que en el audiovisual, lo aprecié en apps cotidianas. ¿Acaso WhatsApp es así de verde? Asimismo, recalco que en exteriores necesitarás poner el brillo al 100% para poder ver.
Pese a ello, el términos generales, la pantalla no decae y se posiciona como un punto fuerte del modelo.
Lo visto es decente, pero ¿lo oído? El ZTE Blade V30 nos trae un ecualizador para mejorar nuestro audio en audífonos (ya lo mencioné, pero vuelvo a señalarlo: trae uno en la caja), pero en altavoz debe… y mucho. Además de tener una sola salida (que puede ser obstruida fácilmente), su volumen es bajo, por lo que no será tu primera opción si quieres amenizar una pequeña “reunión” improvisada o escuchar un audio por la calle. En este sentido, también noté que entre el penúltimo y el último nivel de audio (el volumen más alto) hay una gran diferencia de ruido.
Gran autonomía
Pero si de algo puede presumir el ZTE Blade V30 es que mantiene una batería rendidora. Con 5000 mAh, el equipo ha logrado durarme hasta dos días completos de uso continuo. Durante las pruebas, me resistió toda mi jornada laboral en mi día pesado. Completamente satisfecho con este punto, pese a su carga “rápida” de 18W que en el uso no resulta tan veloz.
Nos debe en cámaras inteligentes
Finalmente, el apartado de cámaras es un punto a debatir. Siento que es decente, pero si vas examinando punto por punto encontrarás deficiencias.
De manera general, las imágenes tomadas dan una buena impresión, pero ves su falta de detalles al hacer zoom o enfatizar ciertas zonas en tu composición.
Como todo equipo, funciona mejor con iluminación natural fuerte, pero no deja de tener ese tipo de “acuarelización” en algunos fondos uniformes.
Considero que la inteligencia artificial, consecuencia del chip, no es la que trabaja de la mejor manera. No halla los puntos de resalte de la fotografía y, al procesarlos, no explota las imágenes cómo sí lo hacen otros equipos.
Otro detalle a tomar es que demora uno o dos segundos al tomar la fotografía. No es inmediato y se siente.
También critico el poco zoom (hasta x4) de la cámara.
El apartado de video tampoco es su fuerte, con una grabación de 1080 pixeles a 30 cuadros por segundo con colores no fieles a la realidad y con una estabilización de imagen poco trascendente.
¿Vale la pena el ZTE Blade V30?
Creo que la persona correcta sabrá poner en la balanza los pro y contras del ZTE Blade V30. Por su rango de precio (inferior a los 900 soles y en oferta con planes), siento que sobresale en autonomía, brinda un diseño elegante y te permite disfrutar de buena multimedia. Sin embargo, súmale una cantidad media de aplicaciones y ya empezará a sufrir, jugarás en configuraciones básicas los títulos del momento y su cámara no te deslumbrará. No es malo en absoluto y podría ayudarte a decidir el hecho que cuente con un Android 11 casi puro (sin tanta app que entorpezca la experiencia) o tener puerto de audífono y venir con el suyo propio, pero solo lo recomendaría si eres un usuario NO demandante, con mayor preocupación en la batería y la pantalla o tal vez 'un caserito' de ZTE. De lo contrario, si estás buscando una buena relación de componentes y performance en general por el precio a pagar (sin ataduras de marca), puedes buscar otras opciones.
* Equipo prestado por ZTE desde el 20 de enero hasta la publicación de la reseña. Precio: 899 soles en equipo libre en Entel.
Te recomendamos METADATA, el podcast de tecnología de RPP. Noticias, análisis, reseñas, recomendaciones y todo lo que debes saber sobre el mundo tecnológico. Para escucharlo mejor, #QuedateEnCasa.
Comparte esta noticia