La canadiense Bianca Andreescu, de 19 años, se impuso a Serena Williams en la final del US Open con parciales de 6-3, 7-5 en 1 hora y 40 minutos.
La canadiense Bianca Andreescu rompió a llorar al hablar este sábado del US Open, su primer título de Grand Slam, conseguido tras imponerse en la final a la favorita Serena Williams.
"Yo me visualicé jugando la final, de hecho ante Serena Williams. ¡Qué locura!", dijo antes de comenzar a luchar con el llanto en la conferencia de prensa después del partido.
"He soñado con este momento por tanto tiempo. Como les dije, cuando gané el Orange Bowl, un par de meses después, realmente pensé que podía llegar a este nivel y desde entonces lo visualicé todos los días".
Andreescu, de 19 años, se convirtió en la primera canadiense en ganar un Grand Slam y la primera menor de 20 años en llevarse el trofeo desde que lo hiciera María Sharapova en 2006.
"Mis objetivos siempre fueron ganar tantos Grand Slams como fuera posible, ser número 1 del mundo, pero la idea de fama nunca me cruzó por la mente. No me estoy quejando, ojo. Ha sido una travesía muy loca", indicó.
Andreescu indicó que antes del partido meditó, como en todos los anteriores del torneo, y que trató de guardar la calma antes del partido con la multicampeona.
"Sentí muchas cosas antes del partido, muchas más que con otro partido", señaló. "Traté de respirar lo más posible desde el momento que me desperté hasta el partido, traté de pasearme por todo el partido para calmar mis nervios".
Cuando tomó la punta 6-5 en el segundo set, recordó que se dijo: "pon la bendita bola dentro de la cancha y respira tanto como sea posible porque está sirviendo".
Andreescu encuentra algunas "similitudes" con el juego de su rival, pero al mismo tiempo quiere tener su propio estilo.
"Quiero hacerme un nombre propio, sé que tengo un estilo diferente a muchas jugadoras del circuito y me ha servido muy bien, juega a mi favor y lo quiero seguir mejorando", dijo, expresando su admiración por Williams.
"Estoy seguro de que no soy la única", señaló. "Es una inspiración para muchas personas, no solo atletas, por lo que ha hecho en la cancha, es una gran campeona".
"Es una mujer de buen corazón, se me acercó en el vestuario y dijo cosas muy lindas que tendré por mucho tiempo. Me gustaría ser como ella, ¿quién sabe? A lo mejor soy mejor". AFP
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