Donald Trump plantearía que los hijos de extranjeros nacidos en Estados Unidos adquieran la ciudadanía solo si al menos uno de sus padres es naturalizado o residente permanente.
La victoria de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos 2024 ha puesto en alerta a millones de inmigrantes en el país norteamericano, sobre todo en los indocumentados. Sumado a ello, ha crecido la preocupación debido a una posible eliminación de la ciudadanía automática para los hijos de extranjeros.
En su plan de campaña, Trump habría señalado que si llegaba a la Casa Blanca, implementaría esta medida, que señala lo siguiente: "Dirigirá a las agencias federales para que requieran que al menos uno de los padres sea ciudadano estadounidense o residente permanente legal para que sus futuros hijos obtengan la ciudadanía estadounidense automática".
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Pocas probabilidades de obtener la residencia en USA
De acuerdo a un informe de The Economic Times, la ciudadanía por nacimiento al menos les daba un respiro a los hijos de las inmigrantes que estaban esperando en la fila para obtener una Green Card. Si no era para los padres, al menos sus hijos tenían asegurada la estabilidad en el ámbito migratorio.
Sobre todo en el caso de nacionalidades que tienen asignadas una cuota de Tarjetas Verdes por año. Muchos extranjeros que trabajan en EE.UU. con visas H-1B están atrapados en un retraso de décadas. Además, ningún país puede recibir más del 7% del total de las Green Cards en las categorías de empleo o familiares. Esta restricción afecta desproporcionadamente a los solicitantes en la categoría basada en el empleo.
Lo que opina Donald Trump sobre la Green Card
Trump ha compartido recientemente opiniones mixtas sobre las políticas de la Green Card, con algunas posturas que sugieren posibles ajustes. Por un lado, ha propuesto facilitar la inmigración de trabajadores calificados al sugerir Green Cards automáticas para estudiantes internacionales que se gradúen en universidades de EE.UU., incluyendo programas de dos años.
Al mismo tiempo, ha enfatizado la aplicación estricta de otros procesos de inmigración, insinuando la posibilidad de endurecer las reglas para categorías más amplias de inmigración y acelerar las deportaciones para aquellos sin estatus legal.
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