La manifestación, que inició en la Placita Olvera, se extendió hasta una de las vías más transitadas de Los Ángeles, California.
Miles de manifestantes, en su mayoría latinos, tomaron las calles del centro de Los Ángeles y bloquearon la autopista 101 en una protesta masiva contra las políticas migratorias de Donald Trump. Con banderas de diversos países latinoamericanos y pancartas con mensajes de resistencia, los manifestantes exigieron el fin de las deportaciones.
El colapso del tráfico en una de las arterias principales de la ciudad fue recibido con reacciones mixtas. Mientras algunos automovilistas expresaban frustración, otros mostraban su apoyo, como Abby Cox, quien desde su auto hizo una señal de corazón en solidaridad con los protestantes.
Te recomendamos
Un llamado de alerta ante las deportaciones masivas
La protesta comenzó al mediodía en la Placita Olvera, desde donde los manifestantes avanzaron por la Avenida Alameda hasta ingresar a la autopista 101 a la altura de la calle Los Ángeles. A pesar de las advertencias de la Patrulla de Carreteras de California (CHP) sobre los peligros de manifestarse en vías estatales, la multitud ignoró los llamados y permaneció bloqueando la vía.
Las políticas de inmigración de Trump han intensificado las deportaciones y aumentado el despliegue de agentes en la frontera sur. Esta situación ha provocado una creciente preocupación en la comunidad inmigrante, que teme por su seguridad y estabilidad en el país.
Algunas historias que inspiran
Entre los manifestantes destacaban historias de lucha y resistencia. Alejandra, una mujer embarazada de origen mexicano, participó en la protesta con la convicción de que su futuro hijo sabría que su madre luchó por los derechos de su familia. "Mis padres llegaron aquí buscando una vida mejor y no podían protestar por miedo a ser deportados. Hoy yo levanto la voz por ellos", declaró.
Rafael Estrada, estudiante de medicina, también alzó su voz en honor a su familia. "Nuestros padres y abuelos han construido este país. No podemos quedarnos callados ante esta injusticia", afirmó mientras sostenía una bandera de El Salvador.
Momentos de tensión y escasa presencia policial
A pesar de la magnitud de la protesta, la presencia policial fue limitada. En ciertos momentos, la tensión aumentó, como cuando un automovilista lanzó insultos a los manifestantes y fue confrontado con una piedra. Otro incidente involucró a un conductor de un Tesla, quien fue rodeado por manifestantes hasta que algunos lograron calmar la situación y permitirle continuar su camino.
A lo largo de la jornada, las pancartas expresaban mensajes contundentes: "Nuestra familia trabaja más que tú, presidente", "Ningún ser humano es ilegal" y "El odio nunca hará grande a esta nación". Los testimonios reflejaban miedo, indignación y el anhelo de un futuro más justo para la comunidad inmigrante.
La maquinaria de deportación sigue avanzando
Las políticas migratorias de Trump han incluido el uso de tropas en la frontera y la ampliación de centros de detención, incluyendo bases militares como la de Guantánamo, con capacidad para albergar hasta 30 000 inmigrantes.
Jonathan, técnico en computación, insistió en que la comunidad latina debe mantenerse unida ante esta amenaza. "Tenemos que demostrarle a Trump que no nos quedaremos callados. Somos la voz de nuestras familias y vamos a seguir luchando por ellas".
A pesar de la magnitud de la protesta, el saldo fue pacífico y sin arrestos, según informó el Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD). La jornada dejó en evidencia la creciente preocupación de la comunidad inmigrante y su determinación para defender sus derechos en un país que también consideran suyo.
Créditos vídeo: YouTube | @ABC7.
Comparte esta noticia