Texas implementa un programa para reembolsar a propietarios de tierras en la frontera por daños causados por migrantes y narcotraficantes. Este esfuerzo llega tras décadas de problemas para propietarios afectados por la actividad criminal en la zona fronteriza.
El Procurador General de Texas, Ken Paxton, inauguró un programa destinado a reembolsar a los propietarios de tierras a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México por los daños causados por migrantes, contrabandistas y narcotraficantes. Este programa ofrece compensaciones de hasta U$D 75 mil por incidentes documentados con un informe policial, brindando un alivio económico significativo a los afectados.
Existe un plazo
Según la oficina de Paxton, los propietarios tienen un plazo de 90 días para presentar sus reclamaciones desde la fecha del incidente. La iniciativa fue implementada tras la aprobación del Proyecto de Ley Senatorial 1133, que asignó U$D 18 millones del presupuesto estatal para este propósito en el año actual y el próximo. Los daños a la propiedad incluyen la destrucción de vallas, graneros y otras infraestructuras esenciales para la operación agrícola y ganadera.
Paxton responsabilizó a la administración del presidente Joe Biden por la situación, argumentando que las políticas federales han permitido la entrada de extranjeros que causan estos daños. “Este programa brindará el alivio necesario a los tejanos cuya propiedad haya sido dañada por extranjeros autorizados a ingresar al país por parte del gobierno federal”, declaró Paxton.
Se busca brindar alivio
El programa busca aliviar la carga financiera sobre los agricultores y ganaderos de las zonas fronterizas, quienes han sufrido estas pérdidas durante décadas.
El programa excluye daños ocurridos antes del 1 de septiembre de 2023, fecha en la que entró en vigor la SB 1133. Los propietarios de tierras pueden presentar sus solicitudes en línea y recibirán la correspondencia vía correo electrónico.
Este esfuerzo representa una acción concreta del gobierno estatal para apoyar a los residentes fronterizos afectados por la creciente actividad criminal en la región.
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