Nuevos acuerdos permiten a las autoridades locales actuar como agentes migratorios, generando preocupación entre comunidades latinas.
Varios condados en Georgia han firmado recientemente acuerdos para ampliar su colaboración con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) bajo el programa 287(g). Esta medida permite a las fuerzas del orden locales desempeñar funciones de agentes migratorios, lo que ha generado inquietud entre las comunidades inmigrantes del estado.
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Implicaciones del programa
El programa 287(g) autoriza a las autoridades locales a identificar y detener a personas sospechosas de estar en el país sin documentación legal. Defensores de los derechos civiles argumentan que esta colaboración puede llevar a perfiles raciales y erosionar la confianza entre las comunidades inmigrantes y la policía.
Respuestas de la comunidad
Organizaciones comunitarias y líderes locales han expresado su preocupación por el impacto de estos acuerdos en la cohesión social y la seguridad pública. Algunos condados han visto protestas y llamados a revisar o rescindir estos acuerdos, mientras que otros defienden la medida como una herramienta para reforzar la ley y el orden.
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