Aunque fue condenado a seis cadenas perpetuas por narcotráfico y asesinato, Hoover podría recuperar la libertad tras la decisión de Donald Trump.
Larry Hoover, el cofundador de los Gangster Disciples y uno de los criminales más temidos en la historia reciente de Estados Unidos, podría recuperar su libertad. A pesar de purgar seis cadenas perpetuas por asesinato y dirigir una red criminal desde prisión, el presidente Donald Trump ha decidido conmutar su sentencia federal, desatando un fuerte rechazo por parte de los fiscales que lo condenaron.
La decisión de Trump sorprendió a las autoridades federales que participaron en el proceso judicial. Ron Safer, fiscal principal en el juicio federal contra Hoover, expresó su decepción, calificando la medida como una conclusión inapropiada para el caso. “Fue probablemente el criminal más notorio que haya conocido jamás el estado de Illinois”, declaró Safer. Hoover dirigía desde prisión una red criminal con presencia en 28 estados y una facturación estimada de más de U$D 100 millones anuales.
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Las condenas que Hoover acumuló por décadas
El camino judicial de Hoover comenzó con una condena de 200 años por el asesinato de William “Pooky” Young en 1973. A esta se le sumaron otros cargos por narcotráfico, extorsión y crimen organizado que resultaron en seis cadenas perpetuas. El golpe definitivo se dio tras una infiltración del FBI que duró seis años, donde un agente federal descubrió que Hoover continuaba dando órdenes desde su celda. Las evidencias permitieron sentenciarlo nuevamente, esta vez bajo cargos federales.
El debate sobre su “cambio” dentro de la cárcel
A lo largo de los años, Hoover y su entorno han sostenido que él ya no es el mismo. En una entrevista concedida en 1993 a CBS Chicago, dijo querer frenar la violencia de pandillas. Sin embargo, un año después fue grabado ordenando que los adolescentes siguieran vendiendo droga para su organización. Esta contradicción ha hecho que muchos, incluyendo los fiscales del caso, duden de su supuesto arrepentimiento.
Los abogados de Hoover han pedido en varias ocasiones la revisión de su condena, argumentando que ha estado en régimen de aislamiento durante 30 años en la prisión ADX Florence, en Colorado. Aunque sus solicitudes fueron denegadas en múltiples ocasiones, en 2022 estuvo a punto de lograr su liberación. Sin embargo, el tribunal rechazó el pedido. La reciente decisión de Donald Trump representa su mayor avance legal hasta el momento.
Pese a que no se ha definido la fecha exacta en que podría salir en libertad, la conmutación ya ha reactivado el debate sobre justicia, reinserción y poder político. Para quienes lo encarcelaron, como Ron Safer, permitir su liberación no solo es un agravio para las víctimas, sino también un mensaje preocupante sobre el tratamiento que reciben los líderes criminales en Estados Unidos. La historia de Hoover, para muchos, está lejos de haber terminado.
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