Si estás considerando obtener la ciudadanía americana, te invitamos a repasar algunos de los mitos y realidades más famosos acerca de este proceso.
Convertirse en ciudadano estadounidense es un sueño para muchos inmigrantes, pero también es un proceso rodeado de ideas equivocadas y mitos que pueden generar confusión.
Desde la creencia de que casarse con un ciudadano garantiza la naturalización inmediata hasta la idea de que los hijos de ciudadanos siempre adquieren la nacionalidad, existen muchas suposiciones que no reflejan la realidad.
Dicho esto, en la siguiente nota te compartimos algunos de los mitos más comunes y las verdades que todos deberían conocer para comprender mejor el camino hacia la ciudadanía.
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Mitos y realidades sobre la ciudadanía estadounidense
A continuación, te mencionamos algunos mitos y realidades acerca de la ciudadanía americana que todo inmigrante que quiera obtenerla debería conocer al derecho y al revés:
1. Mito: ''Casarse con un ciudadano estadounidense garantiza la obtención automática de la nacionalidad''
- Realidad: El matrimonio con un ciudadano estadounidense no otorga automáticamente la ciudadanía. Los cónyuges de ciudadanos deben primero obtener la residencia permanente ('Green Card') y luego cumplir con requisitos adicionales, como residir en Estados Unidos durante al menos tres años antes de solicitar la naturalización.
2. Mito: ''Una vez que se obtiene la ciudadanía estadounidense, no se puede perder''
- Realidad: Aunque la ciudadanía estadounidense es permanente, puede renunciarse voluntariamente o, en casos excepcionales, ser revocada si se descubre que fue obtenida mediante fraude o falsificación.
3. Mito: ''Los hijos nacidos en el extranjero de ciudadanos estadounidenses siempre adquieren automáticamente la ciudadanía''
- Realidad: La transmisión de la ciudadanía a hijos nacidos en el extranjero depende de varios factores, incluyendo el estado civil de los padres y el tiempo que el padre ciudadano haya residido en Estados Unidos antes del nacimiento del hijo. No todos los hijos nacidos en el extranjero de ciudadanos estadounidenses adquieren automáticamente la ciudadanía.
4. Mito: ''Los residentes permanentes legales (titulares de Green Card) tienen los mismos derechos que los ciudadanos estadounidenses''
- Realidad: Aunque los residentes permanentes legales tienen muchos derechos, como vivir y trabajar en Estados Unidos, no pueden votar en elecciones federales, postularse para cargos públicos federales ni obtener ciertos empleos gubernamentales. Además, están sujetos a las leyes de inmigración y pueden ser deportados bajo ciertas circunstancias.
5. Mito: ''No es necesario hablar inglés para convertirse en ciudadano estadounidense''
- Realidad: Uno de los requisitos para la naturalización es demostrar un conocimiento básico del idioma inglés, que incluye la capacidad de leer, escribir y hablar palabras y frases simples. Existen excepciones para personas con ciertas discapacidades o para aquellos que cumplen criterios específicos de edad y tiempo como residentes permanentes.
6. Mito: ''Obtener la ciudadanía estadounidense significa renunciar a la ciudadanía de mi país de origen''
- Realidad: Estados Unidos permite la doble nacionalidad; sin embargo, algunos países no lo permiten. Es importante verificar las leyes de su país de origen para entender cómo la naturalización en Estados Unidos puede afectar su ciudadanía original.
Video: YouTube | Estudiando Con Fernando
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