Fuentes del Gobierno provincial de San Juan aseguraron que la confusión se debió a que el número del DNI de Paulo Alfredo Farina (60) es igual al de una mujer fallecida.
El argentino Paulo Alfredo Farina, de 60 años, estuvo a punto de no poder votar en una consulta popular para reformar la Constitución de la provincia argentina de San Juan (noroeste) porque, según el padrón del colegio electoral, estaba muerto.
Tras percatarse del error, las autoridades de mesa le permitieron emitir su voto, lo que llevó a que algunos políticos de la oposición denunciaran que se habían cometido irregularidades porque un fallecido había votado en las elecciones, en las que se aprobó la enmienda constitucional que permitirá al gobernador de San Juan, José Luis Gioja, optar a un tercer mandato.
"Lo tomé un poco mal cuando ocurrió todo y me encontré con que no sabían si me dejaban votar porque figuraba como fallecido", relató Farina a la televisión local.
Horas después, no podía creerse que, después del mal trago en las urnas, su nombre apareciera en los medios locales porque insistían con que estaba muerto.
"En el padrón de unos pícaros aparece como fallecido, pero figura en un padrón trucho (falso) en donde hay como 13.000 fallecidos", aseguró Eduardo Quattropani, miembro del Tribunal Electoral.
No obstante, fuentes del Gobierno provincial aseguraron que la confusión se debió a que el número del documento de identidad de Farina es igual al de una mujer fallecida.
-EFE-
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