Artículo explora todos los métodos masculinos de anticoncepción y los compara con la historia del desarrollo de los anticonceptivos femeninos.
Los avances científicos en anticoncepción masculina aún no presentan resultados concretos. A diferencia de las mujeres, el hombre solo cuenta con el condón y la vasectomía para cuidarse; sin embargo, todo apunta al diseño de un método más seguro y flexible para ellos.
En un artículo publicado en la sección salud de la revista Time, la periodista Meredith Melnick recuerda los problemas de la medicación en mujeres al analizar la llegada de un método anticonceptivo masculino.
En la mujer la realidad de tomar una medicación diaria, "por no hablar de los gastos y los efectos secundarios desagradables" hacen que estos métodos sean más una carga que una ayuda en su salud reproductiva.
Melnick dice que para los cientificos, el ingreso de un control de natalidad masculino podría finalmente ayudar a que hombres y mujeres se pongan de acuerdo y sean verdaderamente responsables, algo que sería realidad en unos 10 años.
En un artículo publicado en el New York Times, la periodista Pam Belluck explora todos los métodos masculinos de anticoncepción y los compara con la historia del desarrollo de los anticonceptivos femeninos.
Recuerda Belluck que el desarrollo de la píldora anticonceptiva femenina se inició durante la búsqueda de un tratamiento de fertilidad; cuando este falló, los investigadores se dieron cuenta que tenían un método anticonceptivo que podría ser eficaz en sus manos.
Del mismo modo, la mayoría de los anticonceptivos masculinos desarrollados, partieron de tratamientos para enfermedades no relacionadas.
Por ejemplo, un medicamento llamado gamendazole se desarrolló primero como un medicamento contra el cáncer, pero se dieron cuenta que el fármaco interrumpía el ciclo de maduración de los espermatozoides.
Otros dos "descubrimientos accidentales" que están en fase de desarrollo, son un medicamento para la presión arterial y una medicación antipsicótica, que impiden la eyaculación durante el orgasmo.
Se está estudiando el efecto de combinar hormonas femeninas y masculinas para interferir con la capacidad de los espermatozoides para iniciar un embarazo, pero hay preguntas pendientes acerca de los efectos a largo plazo la supresión de la testosterona en los hombres.
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