Cuando ocurre una falta de deseo sexual, es necesaria una evaluación integral y multidisciplinaria.
El deseo sexual está más asociado a un nivel psicológico o mental, mientras que la excitación sexual es algo más orgánico, como la lubricación en la mujer o la erección en el varón. Sin embargo, ambos están muy relacionados.
El médico urólogo Alberto Tejada y la ginecóloga Flor de María Carvallo estuvieron en Siempre en Casa de RPP Noticias y dieron importantes pautas sobre qué hacer si ocurre una disminución del deseo sexual:
¿Qué provoca la baja del deseo sexual? El especialista explicó que el problema puede tener una causa emocional como son los conflictos de pareja, pero también hay otras posibles razones: diagnósticos relacionados a la presión, diabetes o a alguna medicación que se esté ingiriendo.
El sexo es importante. Indicó que llegar al fondo del problema es muy importante, porque “la sexualidad no solo genera bienestar, preserva la salud cardiovascular, la fertilidad, la disposición de la pareja, y hasta mejora la inmunidad”.
Exámenes. El doctor Tejada dijo que para dar con la causa de la baja del deseo sexual, se realizan pruebas para detectar si hay algún desequilibrio hormonal o quizá estrés. Por ejemplo, indicó, un examen de orina ayudaría a resolver si los orgasmos sin eyaculación provienen por una medicación o existe un trasfondo emocional.
Interrogar al paciente. La médico ginecóloga Flor de María Carvallo apuntó que en el caso de las mujeres, también se indaga sobre si existen conflictos de pareja asociados a la falta de deseo sexual; pero un examen físico es necesario, porque quizá la fémina está entrando a la perimenopausia (etapa previa a la menopausia) y se debe consultar sobre algún fármaco que pueda estar tomando.
Medicación perjudicial. Por ejemplo, los anticonceptivos orales que disminuyen la producción de estrógenos y testosterona, que son los principios activos que generan el deseo sexual. El paciente puede estar tomando anticonvulsivantes (previene o interrumpe las convulsiones), antihistamínico (reduce alergias), los betabloqueadores (trata la hipertensión), los antidepresivos o los fármacos para dormir.
En cuanto a personas hipertensión, la doctora explicó que en el 70 % de los casos se va el deseo sexual aún sin tomar medicación.
Trabajo multidisciplinario. Es decir, una persona con una disminución del deseo sexual debe ser vista por varios especialistas, que pueden ir desde un psicólogo, cardiólogo, psiquiatra o médico internista, con la intención de que se le suministre una medicación que no le disminuya la libido.
El consejo del experto. Sea varón o mujer, ante un cambio en el impulso sexual y la frecuencia, se debe buscar ayuda profesional; sobre todo en aquellos casos en los que parejas que se someten a tratamientos de fertilidad, pues son ellos quienes suelen caer en cuadros de ansiedad si han pasado por intentos fallidos.
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