Si se detecta a tiempo y se sigue un tratamiento con cuidado y constancia, se puede conservar la vista.
Al no presentar síntomas molestos o dolorosos, el glaucoma es considerado una enfermedad silenciosa que al ser detectada en etapas avanzadas, puede causar la pérdida parcial o total de la visión.
Janet Osorio, jefa del Oftalmología del Hospital Eduardo Rebagliati del Seguro Social de Salud (EsSalud), explicó que el glaucoma es la acumulación de la presión del fluido intraocular, que al no drenar causa un aumento de presión en el interior del ojo, dañando al nervio óptico -que es muy sensible- y provocando así la ceguera.
“Esta acumulación de la presión del fluido ocurre lentamente, con frecuencia no hay síntomas molestos o dolorosos, en las variedades menos frecuentes de glaucoma los síntomas pueden ser más severos”, indicó la doctora Osorio.
El especialista recomendó la revisión como parte de los exámenes oculares de rutina en niños, adolescentes y adultos. “Todas las personas deben hacerse exámenes integrales para despistaje de glaucoma, posteriormente cada dos o cuatro años. Si usted posee mayor riesgo para desarrollar la enfermedad, debe hacerse el examen cada uno o dos años a partir de los 35 años de edad”, señaló.
Advirtió que la pérdida de visión causada por el glaucoma es irreversible, pero si se detecta a tiempo y se sigue un tratamiento con cuidado y constancia, se puede conservar la vista.
Por lo general, el glaucoma se puede controlar con medicamentos o cirugía, y seguir un plan de tratamiento es muy importante una vez que se diagnostica la enfermedad.
Comparte esta noticia