Los agresores se caracterizan por sus estallidos de violencia y en muchos casos presentan una clara doble fachada social, señala especialista.
El Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social (Mimdes) dio algunas pistas para reconocer a un agresor que podría más adelante cometer un feminicidio.
Según los datos brindados por el Centro de Atención Institucional Frente a la Violencia Familiar (CAI) del Programa Nacional Contra la Violencia Familiar y Sexual del Mimdes, el cien por ciento de los agresores tiene una relación de pareja con la víctima.
La coordinadora de la institución Ysabel Guillén, explicó que los agresores se caracterizan por sus estallidos de violencia. Tras la agresión, agrega Guillén, viene el arrepentimiento, el perdón y la falsa promesa. Además, se vuelven más cariñosos y quieren dar gusto en todo a la pareja.
También dijo que existe el “agresor cíclico”, el cual presenta una clara doble fachada social, pues ejerce violencia en la intimidad del hogar, pero desarrolla discursos justificadores de su violencia y externaliza su responsabilidad ante otros.
Este presenta dificultad para describir y explicar sus emociones, conductas celotípias (celos) y control general en los espacios familiares, laborales y sociales de la pareja, anotó la especialista.
Otros agresores presentan alteraciones de la conducta porque no responden de forma empática en sus relaciones de pareja, o se preocupan por no dejar huellas visibles en sus agresiones a través de la violencia psicológica.
Comparte esta noticia