Por cada gramo de alcohol ingerido, la producción de orina aumenta en 10 ml, sostienen especialistas del Ministerio de Salud (Minsa).
Contrariamente a lo que se piensa, el consumo de cerveza produce deshidratación pues inhibe la hormona antidiurética, ocasionando que se expulse más líquidos de los ingeridos, explicaron especialistas del Ministerio de Salud (Minsa).
“Se cree que las bebidas alcohólicas reducen la sed, en especial en verano; sin embargo cuando se bebe la tendencia a orinar aumenta porque el alcohol tiene un efecto diurético. Por ese mismo motivo al día siguiente la persona tiene mucha sed”, aseguraron.
Por cada gramo de alcohol ingerido, la producción de orina aumenta en 10 ml, con ello no solo se pierde agua sino minerales, lo que puede producir cambios de carácter, calambres, mareos, fatigas, cansancio, aumento de frecuencia cardiaca, de temperatura corporal y náuseas.
A largo plazo puede producir infección urinaria, formación de cálculos renales, estreñimiento, migraña y trastornos broncopulmonares. La sed es el último síntoma de deshidratación.
"Está demostrado que las bebidas con un contenido igual o mayor a un 4% de alcohol (una cerveza está en torno al 4.5%) retrasan el proceso de recuperación por su conocido efecto diurético", añadieron.
Incluso se puede perder agua equivalente a un 1% del peso corporal. Los síntomas típicos de la resaca tienen relación sobre todo con la deshidratación.
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