La psicoterapeuta Claudia Tassara indicó que es muy importante que el padre y la madre traten de llegar a acuerdos durante el proceso de divorcio por el bienestar emocional de los hijos.
La psicoterapeuta Claudia Tassara, en diálogo con RPP, comentó que los niños que están inmersos en la separación o divorcio de sus padres pueden ser propensos a sufrir de ansiedad, estrés y depresión. Además, pueden volverse más cerrados socialmente y presentar problemas en el ámbito académico.
En ese sentido, es muy importante que el padre y la madre traten de llegar a acuerdos por el bienestar emocional de los hijos. "Estos acuerdos primero se conversan en pareja: ¿cómo van a hacer? ¿con quién va a dormir (el hijo)? ¿cómo van a hacer los fines de semana? Eso se conversa para poder darle a nuestros hijos esa estabilidad que necesitan, porque ellos también van a cambiar sus vidas", apuntó la especialista.
Lo otro que deben hacer los padres es brindar información adecuada sobre los motivos del divorcio, pues, de lo contrario, los hijos pueden empezar a "fantasear" que ellos son los culpables de la separación matrimonial. "La primera fantasía (de los niños) es que se separaron por mí, porque fui malcriado, porque tengo malas notas. Se sienten culpables y eso es algo inherente en los infantes", mencionó Claudia Tassara en el programa Encendidos.
Vivir bien
Los padres deben brindar información adecuada a los hijos sobre los motivos del divorcio, dice la psicoterapeuta Claudia Tassara
Lo ideal -indica la psicoterapeuta- es que tanto el padre como la madre se encuentren presentes al momento de comunicar los motivos del divorcio y dejen en claro que, si bien el vínculo de pareja terminó, el amor hacia los hijos no se va a acabar y que siempre estarán para ellos. "Eso les va a dar un poquito más de seguridad y estabilidad (a los hijos)", afirmó.
"Lo ideal sería que ambos padres estén presentes y que ambos mencionen que, a veces, los adultos tienen conflictos o tienen opiniones diferentes. Y lógicamente cuando hay opiniones diferentes podemos dejar de ser amigos o podemos no seguir un vínculo [...] Se les puede decir (a los niños) que el amor se transformar, no es el amor de pareja que tenemos, pero sí hay un amor hacia nuestros hijos y que eso, indudablemente, no se va a acabar y siempre vamos a estar para ellos", mencionó.
No obstante, cuando el rompimiento del matrimonio fue "muy brusco" o "hubo algo fuerte" dentro de este, los niños deberían recibir asistencia psicológica por su bien emocional. "Cuando han sido casos en los cuales han visualizado golpes o agresiones, sí se necesitaría (terapia) porque los niños están confundidos", indicó Tassara.
Por último, la psicoterapeuta dijo que es fundamental que los padres pregunten a los hijos sobre cómo se sienten con los acuerdos a los que han llegado y qué les gustaría que cambie. Ello con la finalidad de enriquecer la relación familiar post-divorcio.
Vivir bien
Lo ideal es que tanto el padre como la madre se encuentren presentes al momento de comunicar los motivos del divorcio
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