El tipo de entrenamiento físico y el consumo de calorías son clave para modificar la composición corporal. ¿Se puede cumplir con ese objetivo? Una dieta saludable y enfocada en los objetivos a obtener y un plan de entrenamiento físico adecuado son clave.
Uno de los objetivos de cada año en las resoluciones de fín de año es perder grasa corporal y lograr el cuerpo de sus sueños. Un plan que muchos intentan cumplir por medio de intensos ejercicios físicos. Sin embargo, esta no es una aspiración solo de aquellos que buscan reducir medidas sino también en quienes practican deporte regularmente. Estos últimos quieren modificar sus niveles de peso, masa muscular y grasa corporal.
¿Se puede cumplir con ese objetivo? La respuesta es sí: una dieta saludable y enfocada en los objetivos a obtener y un plan de entrenamiento físico son clave. La guía Nutrición para Deportistas elaborada por el Grupo de Trabajo sobre Nutrición del Comité Olímpico Internacional en 2012 explica que los dos principios básicos para la modificación de la composición corporal son la actividad física adecuada para el desarrollo muscular y el balance energético.
El cambio se debe dar paso a paso: se debe contar con tiempo suficiente para darle al proceso el tiempo suficiente para dar resultados y que esto sirva de motivación. Entre los principales consejos para reducir la ingesta de energía y reducir la grasa corporal que explica la guía para deportistas resaltan:
1. Fijar objetivos realistas: Se debe tener en cuenta que el cambio no se alcanzará de una semana a otras, sino que es un trabajo a mediano plazo.
2. Crear un défict de energía: Intentar reducir 500 kcal al día de manera constante. Esto favorecerá la pérdida de grasa sin sacrificar la masa muscular, un sueño para quienes entrenan a diario.
3. Buscar un experto en nutrición: Seas o no un deportista es importante contar con la consejería de un experto en planes alimenticios. Ellos adecuarán los pequeños cambios para alcanzar la meta.
4. Limitar las porciones: Uno de los errores más comunes entre quienes buscan reducir la grasa corporal es salterarse las comidas para mantener la misma cantidad de calorías. Sin embargo, eso solo te llevará a una situación de ansiedad. Lo mejor es reducir los tamaños de las porciones.
5. Mantener la ingesta de carbohidratos y proteínas: La energía que necesitamos durante la actividad física proviene, principalmente, del consumo de hidratos de carbono por lo que es importante su consumo durante los días de ejercicio físico de mayor intensidad. En el caso de las proteínas, una buena distribución de su ingesta durante el día también favorece a mantener la masa muscular.
6. Limitar (o suprimir) la ingesta de alcohol: Si estás en una dieta alimentaria para bajar de peso, consumir alcohol puede hacerte "pecar": es más fácil que se dejen llevar hacia la comida chatarra.
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