Si bien todos los actores políticos pueden ser víctimas de violencia, independientemente de su género, la proporción de intimidación y actos de violencia psicológica que experimentan las mujeres con respecto a los hombres es aproximadamente de 3 a 1.
La violencia contra la mujer también se ve reflejada en los espacios políticos. Datos del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) indican que el 47 % de candidatas al Congreso en las Elecciones Generales del 2021 indicó haber sufrido acoso político durante su carrera. ¿A qué se refiere este término?
De acuerdo con la Ley Modelo Interamericana sobre Violencia Política contra las Mujeres de la OEA, el acoso político es toda acción, conducta y omisión que tiene como objetivo minimizar o anular el reconocimiento o ejercicio de los derechos políticos de las mujeres. Estas acciones, basadas en el género, les causan daño o sufrimiento.
Cabe destacar que el acoso político no se da solamente por adversarios políticos, sino que también se ejerce entre colegas dentro de un mismo partido político e incluso puede darse en los medios de comunicación. Si bien todos los actores políticos pueden ser víctimas de violencia, una investigación de Gabrielle Bardall, experta en asistencia electoral con diez años de experiencia en el apoyo a los procesos electorales, encontró que la proporción de intimidación y actos de violencia psicológica que experimentaban las mujeres con respecto a los hombres era aproximadamente de 3 a 1.
Algunas expresiones de acoso político a las mujeres implican agresiones o amenazas durante el periodo de campaña, la asignación de distritos perdedores, el bajo presupuesto para mujeres electas, el trato discriminatorio de los medios de comunicación, la intimidación, la violencia física e incluso la violencia sexual o la muerte, tal como menciona la Comisión Económica para América Latina y El Caribe (CEPAL).
Además, Diana Portal, comisionada para los Derechos de la Mujer de la Defensoría del Pueblo, lo ejemplifica así: “Esta discriminación específica hacia la mujer puede ser a través de una difamación, una burla de las mujeres por la edad, porque son personas que menstrúan y una desvalorización de su trabajo. Incluso el excluirlas de algunas actividades políticas o limitar seriamente su desarrollo porque están en estado de gestación”, explica.
A todo esto, el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) agrega situaciones como la emisión de propaganda electoral discriminatoria y/o sexista y las expresiones difamatorias que se basan en estereotipos de género para denigrar la imagen pública de las mujeres.
Toda esto tiene como resultado que exista menor participación y representación de mujeres en los espacios políticos, lo cual pone en riesgo la justicia social y la visión de igualdad de género en las decisiones políticas que afectan a todo el país.
Ley contra el acoso político: Hacia una visión más justa e igualitaria
La Ley que previene y sanciona el acoso contra las mujeres en la vida política (Ley N° 31155) fue aprobada en marzo de 2021 y tiene como objetivo establecer mecanismos de atención, prevención, erradicación y sanción del acoso contra las mujeres en la vida política. Así, se busca garantizar el ejercicio pleno de sus derechos políticos y una participación en igualdad de condiciones. En ese sentido, establece multas no menores a 1 ni mayores a 50 UIT para sancionar estos casos.
Específicamente, esta Ley también incluye como manifestaciones de acoso político contra las mujeres acciones como:
a) evitar que asistan a actividades que impliquen el ejercicio de sus derechos políticos;
b) restringir el uso de la palabra impidiendo el derecho de participación política;
c) limitar o negar arbitrariamente el uso de cualquier recurso o atribución inherente al cargo que ocupa;
d) excluir, limitar o impedir el ejercicio de los derechos políticos a causa del estado de embarazo, parto o licencia por maternidad;
e) divulgar imágenes o mensajes a través de medios de comunicación o redes sociales que transmitan relaciones de desigualdad y discriminación contra las mujeres con el objetivo de menoscabar su imagen pública;
f) dar a conocer información, con fines políticos, de la vida personal y privada que carezca de interés público.
Esta Ley será implementada por primera vez en las Elecciones Regionales y Municipales 2022 y constituye un gran paso hacia la igualdad política entre hombres y mujeres. Su valor también radica en que sirve para sensibilizar a la ciudadanía, partidos políticos y organizaciones electorales sobre la importancia de prevenir y denunciar estos casos.
Precisamente, con el objetivo de seguir implementando vías de denuncia y apoyo a las mujeres víctimas de acoso político, el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) tiene a disposición la página web observaigualdad.jne.gob.pe/acoso, donde las víctimas pueden registrar sus casos, además de encontrar información sobre el tema.
Las mujeres tienen derecho a participar activamente en política sin ser acosadas ni discriminadas. Para conseguir justicia social y respetar la democracia inclusiva, necesitamos una mayor representación política de mujeres en el país. Así también se garantizarán sus derechos y será posible dar un paso más hacia la equidad de género.
Las niñas, las adolescentes y mujeres tienen derecho a vivir en un país con igualdad de género y con más y mejores oportunidades; lograr este objetivo es tarea de todos y todas. Creciendo en igualdad, mejoramos como sociedad. Mujeres de Cambio es una campaña organizada por RPP.
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