Este 'sex symbol' de la especie Chelonoidis hoodensis comparte con seis hembras un corral y sacó a su especie de la extinción al reproducir en cautiverio a 800 crías.
La población de tortugas gigantes de la isla Española, en el archipiélago ecuatoriano de las Galápagos, tiene mucho que agradecer a Diego, el súper macho que sacó a su especie del peligro de extinción al reproducir en cautiverio unas 800 crías.
Seis hembras. "Es un macho reproductor sexualmente muy activo. Ha contribuido enormemente a la repoblación de la isla", dice a la AFP Washington Tapia, asesor del Parque Nacional Galápagos (PNG) para la restauración de quelonios. Este 'sex symbol' de la especie Chelonoidis hoodensis tiene más de 100 años y comparte con seis hembras un corral del centro de crianza de tortugas terrestres del PNG en Puerto Ayora, capital de la isla Santa Cruz, una de las principales del archipiélago ubicado en el Pacífico.
Solo quedaban 4. Hace casi cinco décadas en Española, en el sur de las Galápagos -a unos 970 km de la costa de Ecuador-, fueron hallados apenas dos machos y doce hembras de esa especie, para entonces los últimos sobrevivientes nativos del lugar. "Estaban dispersos por toda la isla, con lo cual era imposible que se pudieran reproducir", anota Tapia
Padre del 40% de las crías. "Hasta hace unos seis años atrás, que hicimos un estudio genético, encontramos que él era el padre de casi el 40% de las crías repatriadas a Española", indicó Tapia. Alrededor de 2.000 quelonios han sido devueltos a Española, lo que permitió que los Chelonoidis hoodensis dejaran de estar en peligro de extinción.
Como George. Diego es la contraparte de George, el último ejemplar de la especie Chelonoidis abigdoni que murió en 2012 tras negarse a aparearse en cautiverio con hembras de subespecies relacionadas.
Comparte esta noticia