El robot empático es la segunda versión que llega al espacio. Funciona con inteligencia artificial y aprendizaje profundo.
CIMON-2, una nueva versión empática del robot asistente para astronautas, desarrollado y construido en Alemania, ha demostrado con éxito sus capacidades a bordo de la Estación Espacial Internacional.
Al igual que su predecesor, lanzado al espacio en 2018 y que operó unos meses en el complejo orbital, CIMON-2 tiene como destino el módulo europeo de investigación Columbus. CIMON (Crew Interactive MObile companioN) es un demostrador tecnológico con forma de bola que vuela libremente y que cuenta con inteligencia artificial para la interacción persona-máquina. Llegó al complejo orbital en diciembre.
Con CIMON-2, un astronauta puede activar un análisis lingüístico de emociones a demanda, lo que permite al asistente de IA responder a sus compañeros de trabajo de una manera empática. En la pantalla de su parte delantera, aparece dibujado un rostro. Se espera así proporcionar a los astronautas un entorno más agradable en su trabajo y minimizar el impacto del estrés y el largo aislamiento.
Este nuevo demostrador tecnológico cuenta además con un mejor "sentido de la orientación" que su predecesor, micrófonos más sensibles y sus baterías tienen un 30 por ciento más autonomía. Se planea que trabaje en el complejo orbital durante más de tres años, informa la agencia espacial alemana (DLR) en un comunicado.
Europa Press
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