Desde 1997 se ha implementado un sistema con el que los astronautas pueden votar sin problemas.
Estar a cientos de kilómetros sobre la Tierra orbitando en una estación espacial no es impedimento para que los astronautas estadounidenses puedan participar en las elecciones de su país. Desde 1997, la NASA ha implementado un sistema que permite a los tripulantes de diversas misiones espaciales emitir su voto de manera remota y segura.
Estados Unidos tiene en este momento a 6 astronautas en el espacio, que no tendrían problemas en participar en las elecciones del 5 de noviembre.
Todo comenzó gracias a un proyecto de ley aprobado por los legisladores de Texas en 1997, que dio luz verde a la creación de un mecanismo técnico para que los astronautas pudieran votar desde el espacio.
Ese mismo año, el astronauta David Wolfe se convirtió en el primero en hacer uso de este derecho en unas elecciones locales mientras se encontraba a bordo de la estación espacial rusa Mir.
Voto electrónico encriptado
El proceso es bastante sencillo. Los astronautas reciben una papeleta electoral digital enviada por el Control de Misión del Centro Espacial Johnson en Houston. Utilizando sus credenciales individuales, acceden al documento encriptado, emiten su voto de manera confidencial y lo reenvían de vuelta a la Tierra.
El primer astronauta en votar en una elección presidencial desde el espacio fue Leroy Chiao en 2004, mientras comandaba la Expedición 10 en la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés). Desde entonces, esta práctica se ha vuelto habitual en cada ciclo electoral.
Una cabina improvisada en la EEI
La Estación Espacial Internacional incluso cuenta con un espacio que funciona como una cabina de votación improvisada. Una vez emitidos, los votos son transmitidos a Nuevo México, luego al Centro Espacial Johnson en Houston, y finalmente a los funcionarios electorales del condado correspondiente para su conteo oficial.
Para los astronautas, poder participar en las elecciones desde el espacio es una forma de cumplir con su deber cívico y ejercer su derecho al voto, sin importar que se encuentren a cientos de kilómetros de la Tierra. "Estaba muy feliz de que el proceso existiera y pudiera cumplir con mi deseo de votar en esa elección", declaró Leroy Chiao sobre su experiencia pionera en 2004.
A medida que la exploración espacial avanza y se planean misiones tripuladas a la Luna y eventualmente a Marte en los próximos años, la NASA asegura que los votos de los astronautas seguirán siendo contados sin importar en qué rincón del sistema solar se encuentren.
Comparte esta noticia