El dinámico montaje oscila entre la comedia y el drama y obliga a encontrar recursos creativos y originales para personificar las anécdotas en el escenario.
¿La imaginación de los pobres puede conmover a la misma muerte? Esta es la pregunta que tiene respuesta en la obra “¡A ver, un aplauso¡”, donde actúan Manuel Gold, Nicolás Galindo, Daniela Baertl y Gabriel Iglesias.
Dos payasos callejeros: Tripaloca y Tartaloro, hacen su habitual espectáculo en las calles del cercado de Lima de los 80. El primero cuenta al público el momento en que la muerte vino a llevárselo, al estar desahuciado a causa de la tuberculosis, y cómo, con la ayuda de su compañero, tuvo que engañarla para seguir viviendo.
La excusa que ambos dan para detener a los dos emisarios enviados por la muerte, es que están escribiendo un libro acerca de la vida del moribundo. Frente al singular pedido los mensajeros acceden a esperar y a representar diferentes papeles en entretenidas situaciones.
La dirección está a cargo de Roberto Ángeles y escrita por el dramaturgo César de María (“Laberinto de Monstruos”, de 1998; “Kamikaze! o La historia del cobarde japonés”, de 1999).
El dinámico montaje oscila entre la comedia y el drama y obliga a encontrar recursos creativos y originales para personificar las anécdotas en el escenario. En la comedia, los personajes bailan, cantan, bromean y razonan muy ágilmente mientras escapan de la muerte. En el drama, expresan un tono contestatario, rebelde, reflexivo y aleccionador.
“A ver, un aplauso!” va desde el 21 de setiembre hasta el 22 de octubre del 2012 en el auditorio AFP Integra del Museo de Arte de Lima (MALI), ubicado en la avenida Paseo Colón - Cercado de Lima. Los viernes, sábados y lunes (populares) a las 8 p.m y los domingos a las 7 p.m.
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