El presentador reflexionó sobre su proceso de aceptación, los miedos previos a su salida pública y el impacto de haberlo hecho con honestidad y sin estrategias.
Bruno Pinasco, reconocido conductor de televisión y escritor peruano, compartió detalles sobre el momento en que hizo pública su orientación sexual y la repercusión que tuvo en su vida personal y profesional. En una reciente entrevista para el canal de YouTube Ausencia Cultural, el conductor de Cinescape abordó con honestidad la espontaneidad con la que se dio aquel paso en 2016, durante la celebración de su cumpleaños número 42.
Aquel año, Pinasco publicó en sus redes sociales una fotografía de una torta decorada con los colores del arcoíris. Aunque el gesto no tenía la intención explícita de ser una declaración pública, fue interpretado por muchos como su "salida del clóset", provocando una ola inmediata de mensajes de apoyo. “Fue algo completamente espontáneo. No fue ni pensado, ni estructurado. Simplemente era un momento feliz, con mis amigos, y decidí subir la foto”, explicó.
El presentador recordó que, minutos después de la publicación, su amigo Adriano Canella lo abrazó y lo felicitó por el paso que había dado. Pinasco aseguró que nunca buscó hacer de esa imagen una declaración formal ni mediática. “No quise hacer ningún mensaje editorial. Nada. Solo era mi cumpleaños y estaba feliz”, comentó.
Sus amigos lo inspiraron a tener confianza
Durante la entrevista, Pinasco también reconoció la influencia de figuras como Bruno Ascenzo y Ricardo Morán, quienes previamente habían hecho pública su orientación sexual. Verlos mantener sus carreras sin afectar su credibilidad ni su presencia en los medios lo ayudó a tomar confianza.
“Me dio un poco de tranquilidad ver que sus carreras seguían igual. Entonces dije: ‘No pasa nada’”.
¿Bruno Pinasco perdió contratos?
El también escritor contó que uno de sus principales temores antes de compartir públicamente su orientación era perder el respaldo de las marcas con las que trabajaba. “En ese momento tenía contratos muy fuertes con algunas marcas, y me preocupaba que ya no quisieran trabajar conmigo”, confesó. Sin embargo, sus miedos no se concretaron ya que continuaron apoyándolo sin inconvenientes.
“De verdad le agradezco a la gente porque me adoptaron sin ningún problema, con mucho cariño. Finalmente, lo importante es ser una buena persona, no con quién compartes la cama”, reflexionó.
Infancia, visibilidad y representación
En otro momento, Bruno Pinasco habló sobre su infancia y adolescencia, marcadas por la falta de referentes LGBTQ+ en la televisión y el cine. “Era como una isla. No sabía nada. No había películas o programas que hablaran del tema de forma natural”, recordó. Esa ausencia lo llevó a crecer sin un mapeo claro de su identidad. “No me enamoré de un amigo, era muy tímido. Tampoco se dio un cortejo”, añadió.
El conductor destacó que fue recién en su vida adulta, al conocer a personas como Bruno Ascenzo, que comenzó a ver representaciones reales y cotidianas de relaciones homosexuales. “Ver esa dinámica tan natural me ayudó a entender que todo fluye de la manera más humana posible”.
Finalmente, Pinasco subrayó que nunca llevó una “doble vida”. “Yo nunca aparenté nada. Siempre compartía mis fiestas, mis amigos… así que no creo que haya sido como un ‘destape’. Fue solo una foto, en un momento feliz”.