La víctima, de 23 años, salía de su trabajo en un centro comercial y se dirigía a un intercambio de regalos; cuando fue embestida por un automóvil, que se dio a la fuga.
Un joven universitario murió atropellado, en la avenida Prolongación Javier Prado, frente a un conocido centro comercial, en el distrito de Ate, al este de la capital.
Según las primeras versiones, la víctima se dirigía a un intercambio de regalos navideño, cuando fue embestida por un automóvil. Lo más indignante es que el conductor de este vehículo, lejos de auxiliar a la víctima, se dio a la fuga.
“Ha quedado el guardafango del auto (tirado), probablemente haya sido una camioneta grande. La Policía está haciendo las investigaciones que van a empezar a suceder”, manifestó el tío del joven atropellado.
“Era un muchacho deportista, trabajador, que estaba terminando la carrera de ingeniería industrial y, mira cómo termina, por un total irresponsable chofer. Ocasiona la muerte, lo deja tirado como un animal y se da a la fuga. Es lo peor de todo”, añadió.
Accidente en investigación
Agentes de la Policía Nacional llegaron al lugar y establecieron un perímetro, para realizar las diligencias de ley.
El joven fallecido fue identificado como Erick Muñoz Quispe, de 23 años, quien trabajaba en el área de atención al cliente de una pollería, con lo que pagaba sus estudios de ingeniería industrial.
Las investigaciones contemplan la visualización de las cámaras de seguridad de la zona, a fin de identificar al conductor responsable de este fatal accidente.
El cuerpo de Muñoz Quispe fue trasladado a la Morgue Central de Lima, para continuar con las pesquisas. Al lugar, llegaron amigos del joven, quienes exigieron celeridad en las investigaciones y que el caso no quede impune.
“La verdad que nos apena muchísimo porque, claro, estuvimos compartiendo turno en el trabajo, incluso teníamos la cita para la cual habíamos quedado en reunirnos con los demás chicos y el plan era ese, terminábamos la jornada laboral, nos alistábamos y volvíamos al punto donde habíamos acordado todos poder hacer el intercambio”, refirió un compañero de trabajo de la víctima.
“Él era una persona muy alegre, siempre atenta con todos. Se preocupaba y él era el más entusiasta en estas fechas. Nos quedamos con esa parte de él”, añadió.