Comandante de la FAC reveló que operación de infiltración de las FARC a la base de Apiay, en el departamento del Meta, estuvo a cargo de empleado civil de bajo rango.
El comandante de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC), el general Julio Alberto González, admitió hoy que las FARC lograron infiltrar una base aérea del centro del país desde la que se han lanzado importantes operaciones contra esta guerrilla.
En diálogo con la emisora La W Radio, González explicó que toda la operación de infiltración de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), a la base aérea de Apiay, en el departamento del Meta, estuvo a cargo de un empleado civil de bajo rango que, además, conformaba una banda de robo y venta de repuestos de avión.
"Esa condición de delincuentes facilitó para que las FARC pudieran hacer contacto con ellos y, por un bajo precio, traicionaron a todos sus compañeros", indicó González.
Medios locales coinciden en asegurar que la cabeza visible de la banda era Ferney Ortiz Beltrán, técnico en aeronaves vinculado hace 18 años con la FAC y experto en mantenimiento de aviones de alta tecnología, contactado por el Bloque Oriental de las FARC.
González agregó que Beltrán, así como otros cinco implicados en la cadena de robo fueron capturados el viernes pasado.
Los acusados ingresaron hoy en la cárcel de Villavicencio, la capital del Meta, por orden del juez de control de garantías que asumió el caso, según informó la Fiscalía General en un comunicado difundido en Bogotá.
La entidad judicial indicó que el juez los procesó como "presuntos responsables de los delitos de concierto para delinquir y peculado por apropiación".
Los técnicos presos "retiraban repuestos nuevos del almacén de la base pero no los instalaban, sino que los vendían, mientras que las piezas que debían cambiar las arreglaban y las reutilizaban en aviones de combate tipo Embraer (Empresa Brasileña de Aeronáutica) y Tucano", explicó la fiscalía.
En el caso de Beltrán, su principal función era robar las hojas de vida de los pilotos de la base, así como de los militares y contratistas de Estados Unidos que trabajan en ese centro castrense, agregó el comandante de la FAC.
Apiay era unas de las siete bases colombianas incluida en el acuerdo de cooperación militar entre Colombia y Estados Unidos que la Corte Constitucional en Bogotá declaró no ajustado a la Constitución, por cuanto no fue gestionado por el Congreso.
De todos modos, el alto cargo desestimó que la infiltración hubiese puesto en peligro las operaciones de la FAC contra las FARC porque, primero, los que hicieron esa labor eran personas de bajo perfil y, segundo, porque esas acciones tienen un "alto grado" de reserva.
"No sabemos hasta dónde llegaron, pero no creemos que hayan obtenido esa información, porque se trata de gente de bajo rango", aseguró González.
Agregó que también las FARC tenían planeado ingresar una motocicleta bomba a la base de Apiay y que esta parte del plan y otros detalles estaban en un archivo de los computadores del "Mono Jojoy" o "Jorge Briceño", alias de Víctor Julio Suárez, responsable militar de esta guerrilla.
El jefe militar insurgente murió el pasado 22 de septiembre justamente en un bombardeo de la FARC a su campamento en la serranía de La Macarena (sur).
En su edición impresa del domingo pasado, el diario El Tiempo señaló que las FARC habían logrado infiltrar la base de Apiay y que los rebeldes planeaban atentar contra sus pilotos.
EFE
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