Estudiantes, egresados y profesores han creado el hashtag #PANCHITOTAMBIENESUSMP para evitar que se desaloje a Francisco Curi de su punto de venta de hace más de 20 años.
Como muchos otros connacionales del interior del país, en 1967 Francisco Curi partió del Cusco hacia la capital alejándose, definitivamente, a causa de las circunstancias adversas, de uno de sus sueños, quizá el más importante de su vida: ser policía.
Al arribar a la “Ciudad de los Reyes” apenas contaba con 14 años de edad y, en vez de continuar con sus estudios de nivel secundario, terminó, también por la dureza y algidez del contexto socioeconómico, trabajando, en un primer momento, en actividades relacionadas a los quehaceres del hogar.
En el transcurso del interregno, el popular “Panchito” comenzó a dedicarse a la venta de helados en colegios e institutos. Es en esta situación que, durante la segunda administración de Fernando Belaúnde Terry, llegó a asentarse en los exteriores de la Facultad de Derecho de la Universidad de San Martín de Porres (USMP), ubicada en el distrito de La Molina.
Pero su estancia fue efímera por los constantes operativos policiales en contra de los vendedores ambulantes, motivo por el cual decidió, en 1984, marcharse hacia otro “nicho” laboral, esta vez a la Facultad de Ciencias de la Comunicación en la Avenida Brasil (Jesús María), que actualmente se ubica en la avenida Tomás Marsano, en Surquillo.
“Comencé a trabajar en este lugar cuando la universidad era una quinta”, cuenta con una emoción inusitada. “Todos los alumnos me conocen y me adoran”, añade. Y la afirmación de Francisco no es para nada una exageración ya que los mismos universitarios lo consideran un “símbolo”.
Tanto es el cariño de los estudiantes de la facultad que, en su onomástico, le llevan diferentes obsequios. “Es un hombre sencillo, noble y trabajador”, dice una estudiante a través de las redes sociales. Pero “Panchito” no se queda corto y “dispara” una sublime confesión: “Los momentos más felices de mi vida son cuando trabajo en esta universidad”.
Sin embargo, este personaje emprendedor, padre de dos hijos (Rafael y Elizabeth), atraviesa un difícil momento debido a que pretenden desalojarlo de su punto de venta, hecho denunciado por decenas de universitarios por las redes sociales.
Por ello, estudiantes, egresados y profesores han creado el hashtags #PANCHITOTAMBIENESUSMP para evitar que la comuna ejecute tal medida. “Es la primera vez en toda la historia de la universidad que se nos ve tan unidos”, subraya por medio de su cuenta en Facebook Jazmin Barrera, alumna de la Universidad de San Martín de Porres.
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