El sumo pontífice calificó la política como ´una de las formas más elevadas del amor, de la caridad, porque lleva al bien común´ y ha defendido el papel de la oración como acto político.
El papa Francisco ha defendido una vez más la humildad y la pobreza como los valores centrales del diálogo evangélico.
“No se puede entender el Evangelio sin la pobreza”, señala.
El sumo pontífice ha reconocido que sabe que podría sufrir un ataque por andar entre las masas al descubierto, pero se deja, dice, “en manos de Dios”. “A mi edad, seamos realistas, hay poco que perder”, manifiesta.
Calificó la política como “una de las formas más elevadas del amor, de la caridad, porque lleva al bien común” y ha defendido el papel de la oración como acto político.
Finalmente, Jorge Mario Bergoglio confesó que le gustaría ser recordado como “un buen tipo”, alguien que "hizo lo que pudo”.
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