En el hogar, los conejitos considerarán como su refugio la jaula donde viven y pasan la mayor parte del tiempo.
Al igual que el perro, el gato, las aves o el hámster el conejo ha pasado a convertirse parte de la familia, una mascota, un animal de compañía en muchos hogares.
En casa, un conejo se comportará similar a su hábitat natural, es decir siempre se mantendrán alerta ante cualquier amenaza. En su ámbito natural, ante cualquier amenaza, este animal se dará a la fuga o se agachará simulando estar muerto. En el hogar, se comportará muy parecido. Si percibe ruidos fuertes el conejo se encogerá con las orejas hacia atrás, los ojos abiertos de par en par y temblará todo su cuerpo.
En el hogar, los conejitos considerarán como su refugio la jaula donde viven, de acuerdo a mascotas.com.
Básicamente, los conejos se alimentan de diversos vegetales, también comen mucho forraje y poco grano. Necesitan comer de a pocos por lo que ingieren pequeñas cantidades de vez en cuando y continuamente.
No debes olvidar que el forraje, fresco o seco, debería ser el componente principal de la dieta y una excelente opción es el heno formado por plantas, con un olor agradable que no esté mohoso o descolorido.
Un conejo requiere de 3 a 5 litros de agua fresca y se recomienda que el recipiente sea lo bastante pesado para que no los tiren. En este caso, lo más recomendable son los bebederos semiautomáticos.
Atención a principales enfermedades de los conejos:
Los ácaros en las orejas se pueden producir por el rascado o sacudida de las mismas.
La orina roja: se debe controlar la alimentación.
Mucosidades: producidas por infecciones bacterianas en las vías respiratorias.
Llagas o úlceras: se producen por contacto de las plantas de las patas con suelos rugosos.
Cuello torcido: originado por una infección bacteriana en el oído interno asociada con enfermedades respiratorias.
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