Desde México, Evo Morales recordó que tras la interrupción del orden constitucional, el Congreso boliviano no ha cumplido con el requisito de evaluar si acepta o no su renuncia.
El expresidente Evo Morales insistió este miércoles en que la represión de las protestas constituyen un "genocidio" en Bolivia, donde 27 personas han muerto desde que estalló la crisis tras las elecciones que llevaron a la renuncia y posterior exilio en México del líder indígena.
"En Bolivia después del golpe de Estado tenemos cerca de 30 muertos, esta masacre es parte de un genocidio que ocurre en nuestra querida Bolivia", dijo Morales en una conferencia de prensa en Ciudad de México. "Están matando a mis hermanos y hermanas".
"Hago un llamado a la CIDH y a la ONU a denunciar y frenar esta masacre de hermanos indígenas que piden paz, democracia y respeto a la vida en las calles", escribió Morales en su cuenta de Twitter. Tras la salida de Morales, el mando en Bolivia fue asumido por la senadora opositora Jeanine Áñez, quien se proclamó presidenta interina. Los disturbios han arreciado desde entonces.
En La Paz, Áñez anunció este miércoles que convocará en las próximas horas a elecciones generales, una demanda de varios sectores sociales tras los comicios del 20 de octubre que fueron calificadas por la OEA como irregulares.
La convocatoria a elecciones es un mandato que asumió Áñez al ocupar la presidencia del país hace una semana, así como la formación de un nuevo Tribunal Supremo Electoral (TSE), luego de que todas sus autoridades fueran detenidas.
Desde México, Morales recordó que tras la interrupción del orden constitucional, el Congreso boliviano no ha cumplido con el requisito de evaluar si acepta o no su renuncia. "No permiten que vuelva a Bolivia, si la Asamblea (Congreso) no ha evaluado mi renuncia yo soy presidente, además soy presidente electo en primera vuelta", reclamó el exmandatario en la conferencia.
(Con información de AFP)
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