El canciller colombiano Jaime Bermúdez calificó así un monumento del fallecido jefe de las FARC, Manuel Marulanda Vélez, en ciudad venezolana fronteriza con Colombia.
El canciller de Colombia, Jaime Bermúdez, calificó hoy de "afrenta al pueblo colombiano" la aparición de una estatua del fallecido jefe de las FARC, Manuel Marulanda Vélez, en una zona fronteriza entre Colombia y Venezuela.
"Es una afrenta al pueblo colombiano", señaló Bermúdez a periodistas al referirse a una efigie que, según el noticiero de televisión CMI, fue ubicada en cercanías a una guarnición militar en el Amparo, estado de Apure (Venezuela), fronterizo con Arauca (Colombia).
El informativo agregó que la estatua del fallecido máximo jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Manuel Marulanda Vélez, alias "Tirofijo", aparece junto a las del "Che" Guevara, Fidel Castro y Simón Bolívar.
"Nadie en el mundo puede abrogarse el derecho de hacerle un reconocimiento a un terrorista o a un grupo terrorista que lo único que le ha traído a Colombia es muerte, terror y pánico", remarcó Bermúdez, quien visitó Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, frontera con Venezuela.
Sin embargo, el canciller colombiano señaló que no tiene información sobre "quien auspicia ese tipo de actos".
No es la primera vez que en Venezuela se rinde homenaje a Marulanda. Ya en un barrio de Caracas, se levantó un busto en su honor y también se utilizó el nombre del rebelde para una biblioteca.
Las relaciones entre Caracas y Bogotá pasan por una profunda crisis generada por la firma de un acuerdo de cooperación militar entre Estados Unidos y Colombia, por el cual fuerzas norteamericanas pueden utilizar siete bases para combatir el narcotráfico y el terrorismo.
Los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, de Ecuador, Rafael Correa, y de Bolivia, Evo Morales, calificaron esa iniciativa de peligrosa y desestabilizadora para la región, por lo que Caracas congeló, en agosto del año pasado, las relaciones diplomáticas y comerciales con Bogotá.
Adicionalmente, en Venezuela, según el Defensor del Pueblo de Colombia, hay detenidos una veintena de colombianos acusados de espionaje.
En vista de eso, el pasado 14 de abril el Gobierno colombiano expidió una "advertencia" a los colombianos que visiten territorio venezolano "como consecuencia de las situaciones recientes que han afectado a connacionales en ese país".
Esa advertencia colombiana fue considerada por el mandatario venezolano como "una canallada" y "una infamia" del presidente colombiano, Álvaro Uribe.
El sábado pasado Uribe insistió en pedir "respeto" a la vida de los nacionales en el exterior, sin citar a ningún país en particular.
Colombia y Venezuela comparten una línea terrestre común, de más de 2.219 kilómetros de longitud y las continuas discrepancias, además, han causado estragos en la economía, como la pérdida de miles de empleos principalmente en la frontera.
EFE
"Es una afrenta al pueblo colombiano", señaló Bermúdez a periodistas al referirse a una efigie que, según el noticiero de televisión CMI, fue ubicada en cercanías a una guarnición militar en el Amparo, estado de Apure (Venezuela), fronterizo con Arauca (Colombia).
El informativo agregó que la estatua del fallecido máximo jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Manuel Marulanda Vélez, alias "Tirofijo", aparece junto a las del "Che" Guevara, Fidel Castro y Simón Bolívar.
"Nadie en el mundo puede abrogarse el derecho de hacerle un reconocimiento a un terrorista o a un grupo terrorista que lo único que le ha traído a Colombia es muerte, terror y pánico", remarcó Bermúdez, quien visitó Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, frontera con Venezuela.
Sin embargo, el canciller colombiano señaló que no tiene información sobre "quien auspicia ese tipo de actos".
No es la primera vez que en Venezuela se rinde homenaje a Marulanda. Ya en un barrio de Caracas, se levantó un busto en su honor y también se utilizó el nombre del rebelde para una biblioteca.
Las relaciones entre Caracas y Bogotá pasan por una profunda crisis generada por la firma de un acuerdo de cooperación militar entre Estados Unidos y Colombia, por el cual fuerzas norteamericanas pueden utilizar siete bases para combatir el narcotráfico y el terrorismo.
Los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, de Ecuador, Rafael Correa, y de Bolivia, Evo Morales, calificaron esa iniciativa de peligrosa y desestabilizadora para la región, por lo que Caracas congeló, en agosto del año pasado, las relaciones diplomáticas y comerciales con Bogotá.
Adicionalmente, en Venezuela, según el Defensor del Pueblo de Colombia, hay detenidos una veintena de colombianos acusados de espionaje.
En vista de eso, el pasado 14 de abril el Gobierno colombiano expidió una "advertencia" a los colombianos que visiten territorio venezolano "como consecuencia de las situaciones recientes que han afectado a connacionales en ese país".
Esa advertencia colombiana fue considerada por el mandatario venezolano como "una canallada" y "una infamia" del presidente colombiano, Álvaro Uribe.
El sábado pasado Uribe insistió en pedir "respeto" a la vida de los nacionales en el exterior, sin citar a ningún país en particular.
Colombia y Venezuela comparten una línea terrestre común, de más de 2.219 kilómetros de longitud y las continuas discrepancias, además, han causado estragos en la economía, como la pérdida de miles de empleos principalmente en la frontera.
EFE
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