Jóvenes se niegan a ser detenidos por las autoridades cuando son intervenidos en las calles. La Guardia Civil está imponiendo miles de multas, en espera de que se cumpla la limitación de movimientos en España.
Un hombre de 28 años se resistió a ser detenido mientras deambulaba en el distrito madrileño de Carabanchel, y desafió a los policías con insultos. “Haré lo que me salga de los cojones, bonita. (…) Que os den por culo, a mí no me dais órdenes”, les dijo. Su arresto es uno de los tantos que se producen en España por incumplir el estado de alarma, en donde ya se han impuesto más de 2500 multas en busca de frenar los desplazamientos de personas.
A otra mujer la detuvieron en la entrada del Parque Tierno Galván, en Legazpi, luego de haber sido grabada por vecinos desde la ventana de un edificio. ¿Su excusa para salir? Había ido a “comprar desodorante”. Tras contradecirse en su versión, la mujer agredió a los agentes y estos procedieron a detenerla.
El tercer caso sucedió en una discoteca de un hotel en Leganés, hasta donde la Policía acudió para interrumpir una fiesta, ante la alerta de un ciudadano. Desde afuera se escuchaba la música a todo volumen y, cuando los efectivos ingresaron, habían bandejas con cocaína y otras drogas. Se identificó y sancionó a tres asistentes de la fiesta que todavía estaban en el lugar, y el resto de participantes se refugiaron en las habitaciones del hotel antes de que llegaran las autoridades, según un comunicado al que accedió el diario El País.
Las infracciones a la Ley de Seguridad Ciudadana, al Sistema Nacional de Protección Civil y a la de Salud Pública pueden acarrear en este país sanciones leves (de 100 a 600 euros) o graves, de hasta 30 000 euros y hasta 60 0000 en caso de incumplir con las medidas en reiteradas oportunidades. Las penas de cárcel de tres meses a un año también podrían aplicarse en caso del delito de desobediencia
ADOLESCENTES ENTRE LAS DENUNCIAS
De las 213 multas impuestas por la Policía Municipal de Móstoles, una decena corresponde a menores de edad. El pasado miércoles, un grupo de adolescentes se reunió a fumar marihuana en la vía pública, por lo que fueron disueltos y denunciados por las autoridades.
Al sur de la región, en Pinto, la Policía ha impuesto 20 multas, la mayoría a adolescentes. En tanto, en Parla, las denuncias son 80; 20 de ellas por actividades grupales realizadas en la vía pública, hasta donde también llegan ciudadanos acompañados con sus mascotas para no ser detenidos por las autoridades.
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