En la investigación se emplearon 142 virus conocidos, transmitidos de animales a humanos, y de especies que podrían haber actuado como potenciales portadoras.
Un estudio divulgado este martes por la entidad científica británica Royal Society establece un vínculo entre las enfermedades infecciosas con los cambios medioambientales, en plena pandemia global de la COVID-19.
La explotación de la vida salvaje por parte de los humanos mediante actividades como la caza, el comercio, la degradación del hábitat o la urbanización afectan al contacto estrecho entre esta y los humanos.
Esto, según la investigación elaborada por científicos del Instituto Sanitario Davis'One, de la universidad de California (Estados Unidos), incrementa el riesgo de desbordamiento (o 'spillover') de los virus.
Muchas de esas mismas actividades también provocan un declive de la población y un riesgo de extinción, advierten los expertos.
El estudio subraya cómo estos procesos que crean el declive de la población de vida salvaje también posibilitan la transmisión de virus de animales a los humanos.
"El 'spillover' (desbordamiento) de virus de animales es un resultado directo de nuestras acciones que implican a la vida salvaje y a su hábitat", señala la principal autora de la investigación, Christine Kreuder Johnson, directora del proyecto en el citado Instituto de la Universidad de California.
La experta agrega que "la consecuencia es que (las especies) comparten sus virus con nosotros" y esas acciones "amenazan simultáneamente la supervivencia de las especies y aumentan el riesgo de 'spillover".
"En una desafortunada convergencia de muchos factores, esto trae el tipo de desastre en el que estamos ahora", apunta, en alusión a la propagación global del coronavirus.
Los científicos emplearon una amplia base de datos de 142 virus conocidos, transmitidos de animales a humanos, y de especies que podrían haber actuado como potenciales portadoras.
Sirviéndose de una lista de especies amenazadas, el equipo investigador examinó patrones que existían en abundancia, otras en riesgo de extinción y analizó causas subyacentes que motivaron el declive de alguna de ellas.
(Con información de EFE)
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